- La asistencia de todos los días no bajó del 70 por ciento en los conciertos y más del 60 en las clases públicas
- Esta edición captó la atención de nuevos grupos sociales como adolescentes y adultos mayores
De regreso en el Teatro Morelos, el Festival de Música de Cámara cumplió su onceava edición con la superación de las expectativas del Instituto Cultural de Aguascalientes en cuanto a la afluencia de personas; todos los días desde su inauguración la asistencia no bajó del 70 por ciento en los conciertos y más del 60 por ciento en las clases públicas.
Para el mediodía del domingo, este festival fue clausurado con un concierto del ensamble de once alumnos de violoncello Cellossollec, dirigidos por Margarita Benavides, el recinto pudo observarse al 80 por ciento de su capacidad, lo que poco se había observado en otras ediciones para el cierre. Al concluir el programa musical fue entregado el Premio Manuel M. Ponce al dúo Riu Galicia de Xalapa, Veracruz.
A lo largo de una semana se ofrecieron nueve conciertos y cinco clases públicas gratuitas, las cuales se consideraron el detonante para el incremento de la participación del público; este evento tiene una plataforma donde se conjunta la parte pedagógica (a través de clases para ensambles de diferente partes de la región), con el entretenimiento y fomento cultural; en esta ocasión las clases públicas ofrecidas en el Teatro Antonio Leal y Romero de la Casa de la Cultura Víctor Sandoval permitieron que los maestros revisaran ante un público general diversos materiales que los alumnos prepararon; con ellas se buscó una retroalimentación distinta con el asistente, no quedarse únicamente con los conciertos nocturnos, sino también con mostrarles un poco de lo que se hace dentro de un salón de clases de música.
Aunque los términos a veces son poco accesibles porque la música tiene su propio lenguaje, el director musical adjunto, David Pérez Olmedo, puntualizó que el lenguaje artístico siempre tiene referencias que permite que todos podamos entender qué es lo que el maestros le sugiere al alumno.
Media hora antes de cada concierto nocturno, uno de los maestros ofrecía una charla introductoria sobre el programa, el autor y la obra, lo cual permitió al festival introducir al público mucho más con los compositores de las obras y aconteceres que lo llevaron a la escritura de esa música.
“Fue una semana muy intensa, de mucho aprendizaje e intercambio de experiencias”, se destacaron las participaciones de uno de los cinco mejores cuartetos de cuerdas del mundo: The Endellion, de Reino Unido; Jeffrey Biegel, un pedagogo, director de orquesta y compositor, considerado como uno de los mejores pianistas norteamericanos, y en lo local al cuarteto José White, que ya es un referente en México por no sólo difundir el repertorio básico de un cuarteto de cuerdas, sino también la música contemporánea mexicana y latinoamericana. Todos dieron una amplia gama de conocimiento a los alumnos participantes y al público asistente.
Desde la perspectiva de Pérez Olmedo, este onceavo Festival de Música de Cámara fue distinto porque englobó muchos elementos que dejaron satisfechos a todos los involucrados en el evento: “el proceso musical no se acaba, siempre hay muchas cosas que aprender y mejorar, por eso siempre es importante trabajar en conjunto”, es vital que cada músico se abra a escuchar voces distintas a la propia para comprender y aceptar que si se tienen conceptos e ideas distintas, sean posibles de llevarlos a cabo a través del diálogo.
Conny Ramírez, directora de promoción y difusión del ICA, celebró que los resultados preliminares arrojaran buenos números para el festival, aunque para la tarde de ayer aún no tenían el conteo final de asistencia, adelantó que se superó la meta de asistencia del año pasado, observándose todos los días una participación no menor al 70 por ciento en los conciertos y más de la mitad en las clases públicas.
Aunque después de once años, el festival cuenta con su propio público cautivo que cada año asiste y demanda la organización de él, este año los organizadores se percataron sorpresivamente de la captación de nuevos públicos ya no sólo aquellos jóvenes o maestros de música, durante la semana asistieron adolescentes en grupo, mujeres adultas y adultos mayores.
Retos para el doceavo festival
“Sin duda alguna siempre van a aparecer retos nuevos pero hasta el momento creo que el más importante será el seguir acercando más públicos, una difusión más masiva sobre el carácter pedagógico y de fomento a la cultura, así como también una mayor apertura a grupos locales”, señaló David Pérez Olmedo.
La segunda etapa del programa Festivales de Verano dará inicio el próximo 22 de julio con el Festival de Canto Operístico, para dar paso al Festival de Jazz del 21 al 29 de agosto; todos se tratan de facetas muy distintas de la música pero que dejan un alto peso cultural en el público y alumnos participantes.
