- Trabajadores deben lidiar con los caprichos de escuelas y proveedores de útiles y uniformes
- Pide la organización a Profeco e IEA permanecer atentos a reclamos
La gratuidad de la educación está presente solamente en las leyes, mas no en los hechos, denunció Jesús Enrique Ramírez Ramírez, delegado de la Confederación Regional Obrera Mexicana (CROM), al señalar que durante las fechas previas al reinicio de clases los padres de familia se ven obligados a realizar sacrificios extraordinarios para conseguir que sus hijos vayan a la escuela.
Las familias del sector asalariado, dijo, enfrentan situaciones que en distintas vertientes han encarecido el acceso a la educación, enfatizando que el principal desfalco es demanda de servicios y bienes de consumo, muchos de los cuales son completamente innecesarios, aunado a los precios que incrementan desproporcionadamente días antes de que comience el ciclo escolar: “En ocasiones se condiciona la compra de útiles, uniformes o zapatos a determinada marca o proveedor que maneja precios mucho más altos que otras tiendas”.
Ramírez Ramírez reconoció que es común que los gastos propios de la temporada empujen a muchos de los trabajadores afiliados a dicha central a las casas de empeño y préstamo, las cuales hacen su “agosto en agosto” valiéndose de altas tasas de interés y otras condiciones irregulares: “Acuden a estos establecimientos a empeñar sus pertenencias, los pocos objetos que tienen de valor, con tal de conseguir el dinero que necesitan para que sus hijos estudien”.
Como si fuera poco, añadió, deben lidiar con el condicionamiento de las mesas directivas de las escuelas con las cuotas escolares, pues muchas veces, al principio del ciclo lectivo, se toman acciones para ejercer presión en los padres de familia, que van desde exhibir a quienes no contribuyeron con las aportaciones supuestamente voluntarias hasta cerrar el acceso a los planteles educativos a hijos de los evasores de este pago; “y nadie sabe a ciencia cierta a dónde va a parar todo ese dinero”.
El dirigente obrero externó a los medios de comunicación que “alguien debe de poner un alto a los abusos que se cometen en esta temporada del año”, y en ese tenor, hizo un llamado a la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) a intensificar la vigilancia en el control de los precios durante este regreso a clases, especialmente en los establecimientos y artículos con mayor demanda como son papelerías, zapaterías, vendedores de uniformes y empeñadoras.
El secretario general de la CROM en Aguascalientes exhortó al Instituto de Educación (IEA) a permanecer atento a los reclamos de los padres a propósito de los condicionamientos que surjan en los colegios particulares y las escuelas públicas en los días sucesivos: “El tener un hijo en la escuela representa una inversión muy fuerte frente a una economía cada vez más débil, con salarios muy bajos. Incluso tenemos conocimiento de que la falta de dinero ha llegado a provocar deserción escolar”.
