- El escenario: pobreza, polarización, migración, inseguridad y un TLC renovado
- Se espera un crecimiento del 1.5 por ciento para el 2019
La pobreza es la expresión más clara de la ineficiencia del sistema económico de los últimos 30 años, esto debe de cambiar y el actual gobierno tiene la oportunidad histórica de hacerlo, señaló Jael Pérez Sánchez, presidente del Colegio de Economistas de Aguascalientes, al hacer un balance de cómo cierra el 2018 en materia económica y cuáles son las expectativas para este año.
Externó que en un país donde predomina la desigualdad y se acrecienta el ambiente de polarización, es deseable que al nuevo Gobierno Federal le vaya bien y que termine la polarización entre “chairos y fifís”, pues es necesaria la unidad del pueblo mexicano, ya que la división no abonará a levantar a un país, en el que sus habitantes no logran ingresos ni siquiera para adquirir la canasta básica alimentaria, en el que uno de cada diez mexicanos se encuentran en pobreza extrema y cada cinco tienen algún grado de pobreza y no cuentan con las condiciones suficientes para solventar sus necesidades básicas.
Pérez Sánchez externó que aunado a la brecha de desigualdad social el país se encuentra en un clima de inseguridad que se ha ido acrecentado los dos últimos sexenios, lo cual empeora la situación, y que es urgente acabar, aunado a una gran corrupción en el gobierno y la sociedad.
¿Cómo cierra el 2018?
En el ámbito económico la expectativa del cierre del 2018, que se dará a conocer los primeros tres meses de este año, se espera un crecimiento del 1.8 o dos por ciento del Producto Interno Bruto, con una expectativa de inflación del 4.7 por ciento, inferior a la del año pasado, al cierre del 2017; una de las más altas de los últimos tiempos, del 6.7 por ciento.
Todo lo anterior está además enmarcado en un contexto internacional en el que México firma un Tratado de Libre Comercio con Canadá y Estados Unidos, que trae nuevas condiciones de comercialización y que será muy relevante para Aguascalientes al depender enormemente de la economía estadounidense, por estar directamente ligada al igual que todo el Bajío, lo que vuelve al estado endeble esa dependencia con el sector automotriz.
A lo anterior se suma un presidente en Estados Unidos acostumbrado a salirse con la suya, y que constantemente impone nuevas tasas arancelarias, por lo cual aún se desconoce qué ocurra con algunos otros rubros comerciales.
A todo lo anterior se suma una crisis migratoria que invade el terreno social, político y económico, al abonar aún más al ambiente de polarización, pues muchos de los centroamericanos, al no lograr pasar a los Estados Unidos se están quedando en el país, lo cual deberá obligar a México a implementar una política de control migratorio, aunque no se quiera, antes de que aparezca un problema social para el país.
Expectativas para el 2019
Un cierre de año complicado en lo político, lo social y lo económico trae las siguientes expectativas para el 2019, según lo que señala del Gobierno Federal el crecimiento para este año será entre el 1.5 con un margen amplio del 2.5 por ciento, pero los economistas consideran que, con base en la economía internacional, seguramente será en la cota inferior, con una inflación del 3.8 al 4.2 por ciento.
Una buena noticia es que los índices de desocupación de empleo permanecerán estables a las del 2018 con un 3.2 por ciento, una de las más bajas de la historia reciente del país, impulsadas por los programas sociales como Jóvenes Construyendo el Futuro de México, con el cual se pretende becar a 2.3 millones de jóvenes sin trabajo para que se capaciten y adquieran una formación laboral.
“En este país tenemos 54 millones de personas ocupadas, más 2.3 millones es bastante significativo, pues se reflejará en las tasas de desocupación, por ello permanecerán bajas en el 2019”, externó el economista.
La interrelación de México, principalmente con el sector industrial de la economía norteamericana, hará que su dinamismo económico disminuya levemente o será más lento, por ello los empleos formales que habrán de registrarse van a ser menores, aunque se compense con el programa social para jóvenes.
