- Alumnos de Trabajo Social aplican los conocimientos del aula para detectar necesidades en las comunidades
- Practicantes realizarán diagnósticos para detectar necesidades y problemas para dar atención según sus capacidades
Inseguridad, desintegración familiar y embarazos no deseados en adolescentes son los problemas que con frecuencia se siguen presentando en las comunidades del estado, informó la maestra Raquel Guadalupe Chávez Limón, responsable de Academia de Prácticas del Departamento de Trabajo Social.
Ayer los estudiantes de trabajo social de la UAA iniciaron sus prácticas comunitarias en las comunidades de El Llano, Asientos, Pabellón de Arteaga y Jesús María donde una vez insertados realizarán diagnósticos para detectar necesidades y problemas para dar atención según sus capacidades.
Chávez Limón detalló que estos estudiantes aplican lo aprehendido en las aulas: hacen trabajo de campo, entrevistan a los habitantes y a autoridades. Una vez analizada la información se elaboran proyectos de intervención en la comunidad dependiendo al sector en el que se intervienen.
Las acciones que se hacen en las comunidades son integrales pues aplican conocimiento en derecho, psicología y salud pública, además de seguir aplicando habilidades propias de la licenciatura de Trabajo Social.
Los alumnos van a las comunidades dos días a la semana acumulando dieciséis horas de trabajo.
Los resultados son compartidos con los habitantes de las comunidades así como con profesores y autoridades estatales.
“En todas las comunidades sí dejamos un impacto, desde el momento en que se modifican conductas, la familia se trata de otra manera, los papás atienden más a los hijos, los maestros atienden de mejor manera las problemáticas de los niños, todo eso va modificando la conducta”, declaró Raquel Chávez
