México recibió 40 mil 607 millones de US dólares en remesas entre enero y diciembre de 2020, lo que representó un aumento del 11% respecto al mismo periodo de 2019, pese a las afectaciones por la pandemia de covid-19, de acuerdo con cifras del Banco de México Banxico. Aguascalientes, recibió 540 mdd, habiendo recibido durante el 2019 la cantidad de 469 millones de dólares, es decir obtuvo un 15% adicional.
Aguascalientes cuenta con 1.13% de la población nacional, pero logró recibir el 1.33% de las remesas nacionales. Durante el último año, aún con pandemia y habiéndose advertido por agencias internacionales que las remesas a nivel mundial disminuirían, siguió subiendo la cantidad de los envíos a nivel nacional y local. Sólo Tlaxcala recibió un poco menos en el 2020 respecto al año anterior (95%) pero la mayoría incrementó su recepción y entidades como Baja California y BC Sur, recibieron un 30% más que en el 2019. El retorno de familiares norteamericanos a sus comunidades de origen, detectados por el Censo 2020, hace suponer la presencia de dólares invertidos en unidades económicas.
A diferencia de la pandemia de influenza del 2009 en la que descendieron en gran medida las remesas (prácticamente la mitad de las recibidas en el 2020) ahora los envíos se multiplicaron fortaleciendo a un gran número de hogares. La economía doméstica depende en buena medida de estas mesadas de 300 dólares (en promedio) canjeadas y consumidas por los familiares beneficiarios en el mercado local. También habría que considerar el uso productivo, particularmente en el campo, que se les da a estos recursos familiares.
Uno de cada cuatro dólares enviados desde la Unión Americana, tiene como destino los hogares de la región Centro Bajío Occidente. Región tradicionalmente migrante que cuenta con el 18% de la población nacional y obtiene el 26 por ciento de las remesas. Aguascalientes se encuentra entre los 12 estados del país que más reciben dólares, a razón de un dólar diario por persona. Los 540 millones alcanzan para 150 mil familias.
La Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible afirma la necesidad de alcanzar 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible específicos (ODS) y propone la seguridad del proceso migratorio. De los 250 millones de personas que viven actualmente fuera de sus países de origen, aproximadamente 200 millones de migrantes abandonaron sus hogares con el fin de enviar remesas a sus familias, lo hacen para que no todos tengan que migrar, y solucionar los problemas que causa la migración.
Por lo tanto, es vital para alcanzar los ODS ayudar a que las familias receptoras de remesas, maximicen su beneficio en el desarrollo de sus propios recursos. La comunidad internacional puede considerar a los migrantes y a sus familias como agentes de cambio y socios clave en esta iniciativa.
Se calcula que el 75% de las remesas se destinan para atender necesidades básicas y el 25% restante se utiliza para otros propósitos.
Con estas cantidades aparentemente modestas, la mayoría de las familias receptoras intentan alcanzar “sus propios ODS”: reducir la pobreza, mejorar la salud y la nutrición, las opciones educativas, la vivienda y el saneamiento, la actividad empresarial, facilitar la inclusión financiera y reducir la desigualdad. También pueden hacer frente a la incertidumbre mediante el ahorro y la adquisición de bienes para asegurarse un futuro más estable.
