Contienda. En rueda de prensa, Juan Antonio Martín del Campo se refirió al registro de Alfonso Jurado para contender por la dirigencia del Comité Directivo del PAN en Aguascalientes, y adelantó además que hará lo propio el subsecretario de gobierno, Manuel Cortina Reynoso; por lo que es necesario esperar cómo se desarrolla esa contienda. Martín del Campo primero dijo que los aspirantes mencionados, incluyendo a Javier Luévano, son buenas propuestas, aunque luego recalcó que las dos mejores cartas son Alfonso Jurado y Manuel Cortina. Sin hablar de si hay o no una división evidente en el PAN, el senador advirtió que cuando la presidencia de un partido acaba siendo el apéndice de un gobierno, esta se pervierte y deja de tener objetividad, pues en la realidad no trabaja para una institución, sino hacia un equipo político, “y cuando trabajas para un equipo político, todo ya valió”, seguramente el senador estaba pensando en la dirigencia nacional y la reelección de Marko Cortés, pero tal y como lo dijo terminó dándole un rozón a la administración de Martín Orozco Sandoval, cuando el gobernador ni en Aguascalientes ha estado porque acaba de regresar de su gira internacional, ¿o el golpe iba para Teresa Jiménez Esquivel?, como fuera, Martín del Campo se fue en banda y desaprovechó para hacer lucir los resultados de los foros y la centena, dice el panista, de iniciativas que pudo sacar de la interacción de los aguascalentenses con los invitados de todos los partidos y alto nivel que el senador trajo recientemente a Aguascalientes.
Distracción. Como habíamos advertido, seguir con la atención puesta en el cambio de la dirigencia estatal panista, ligándola al proceso de sucesión de Martín Orozco, no es sólo una pérdida de tiempo, sino que aleja de la posibilidad de pensar en temas urgentes y verdaderamente importantes, pero a los actores, ansiosos porque ya sea fin de año y se definan las candidaturas, se meten en cualquier tema con tal de figurar, como la diputada federal Teresa Jiménez Esquivel, quien ayer, apoyada por el grupo de lambiscones que todavía comen de su mano, difundieron una actividad irrelevante como si fuera una iniciativa para mejorar la economía estatal. Cómo se ve que Mónica Becerra y Paulo Martínez López no saben allegarse a ese tipo de amigos de la prensa, porque desde que tomaron posesión nada se ha sabido de lo que hacen en su encargo como diputados federales.
Ella se llamaba Martha. Esta obsesión por figurar en la que están cayendo los aspirantes a una candidatura, los hace conceder entrevistas banqueteras en las que antes que mostrar disposición para resolver las inquietudes relacionadas con su desempeño, sólo sirven para generar batallitas mediáticas que a nada conducen, como las declaraciones de la senadora Martha Márquez, a las que también se refirió Antonio Martín del Campo, ante los señalamientos de corrupción que hiciera la senadora Martha Márquez de todos los candidatos de Acción Nacional que hasta el momento han levantado la mano como aspirantes a la gubernatura, el senador y exalcalde aseguró que no existe corrupción chica o grande, y Martín del Campo expuso que la legisladora está mal informada, ya que si de algo es consciente y tranquilo es que su familia no está en la política, quién sabe qué saco se puso el senador. Uno similar al del impresentable Luis Enrique García López, que en todo momento quiere viaje ante los burros que le acercan el micrófono, y retó a Martha Márquez a que presente pruebas de sus acusaciones, envalentonado, Quique Galo dijo que la senadora todo lo quiere resolver con declaraciones a los medios… el gato cree que todos son de su condición, porque García López no dice ni pío cuando el tema es la aclaración del desvío de 130 millones, ahí sí no se anima.
Coleadero. Quien, sin necesidad de hacer olas ni levantando encuestas, está haciendo su caminito hacia la candidatura de Morena, es Ricardo Rodríguez Vargas, en silencio, quien fuera responsable del Instituto para Devolver al Pueblo lo Robado, está siendo considerado por el Comité central morenita para incluirlo en las encuestas rara que hace Morena para elegir a sus candidatos. Por supuesto, Ricardo Rodríguez no es materia de Arturo Ávila o de Eulogio Monreal, porque no está jugando sus fichas locales, sino amarrando las relaciones que le dejó en el partido y en el Gobierno Federal cuando estuvo al lado de Andrés Manuel López Obrador; pensando en Aldo Ruiz, podríamos decir que no basta en vestirse de charro para entrarle al jaripeo, y por lo que escuchamos, Ricardo Rodríguez ya está más que puesto para la faena del coleadero, más ahora que a la maestra Nora Ruvalcaba, la otra candidata verdaderamente viable para Morena, le quieren colgar muertitos que no le corresponden.
Aliados. “Seremos grandes aliados de las mujeres para que sus derechos sean visibilizados y respetados”, comentó el alcalde electo Leonardo Montañez, y entre todos los pendientes que tendrá que retomar bien hizo en mencionar aunque fuera de refilón el de las mujeres, pues lo que deja estas dos últimas administraciones son programas en materia de género que no tuvieron seguimiento y concluyeron de la misma forma que iniciaron, sin pena ni gloria, ejemplos hay varios, como los Puntos Seguros, el Botón de Auxilio de Mujeres Seguras y la app contra la violencia que lo que sí tuvieron fue mucha publicidad pero no eficacia. Leímos sobre Programas de igualdad y no discriminación; talleres para trabajadores del municipio contra el acoso; certificaciones en no discriminación en las dependencias; reuniones y más reuniones y dinero y más presupuesto, mientras los informes y estadísticas sobre violencia señalan el incremento en la violencia en los hogares y en las calles contra las mujeres en el municipio de Aguascalientes. Todos estos programas fueron de la mano de la directora del Instituto Municipal de la Mujer de Aguascalientes, Zayra Rosales, que estuvo en las dos administraciones de Teresa Jiménez liderando sin presentar resultados tangibles. Eso sí, lo mismo la vemos subida en un ring de box para la foto, que en reuniones con la Guardia Nacional ahora que le dieron el encargo de prevenir la violencia de género y la violencia intrafamiliar, sin saber, o tal vez sí pero no le importa al Ayuntamiento, que desproteger a la Policía municipal de sus labores de proximidad es lo que a lo que a lo mejor hizo falta para que la corporación de Antonio Martínez Romo evitara las 236 quejas contra sus elementos, una buena capacitación en materia de género y derechos humanos, pero no, el IMMA ha preferido, o está obligado, a enfocar sus energías en darle a la Guardia atribuciones que no tiene mientras que la Policía municipal anda correteando y golpeando a las mujeres manifestantes. Porque así como que diga el Ayuntamiento actual que las acciones que han emprendido han resultado exitosas, pues no, no hay números que lo demuestren, eso sí cientos y cientos de boletines y fotos de estrategias como la Policía Rosa y las Agentes Rosas, de eso sí hay, lo que no significa que sirvan, pero como siempre, ojalá sí tengan cómo demostrar que las políticas públicas implementadas durante dos administraciones de Jiménez Esquivel han funcionado, porque sería una insensatez y nada que ver con ser aliado que este gobierno de Leonardo Montañez no le diera la vuelta para ahora sí tener resultados que se noten, porque, con estos números, ¿a poco sí está dispuesto el nuevo alcalde a dejar otra vez en sus cargos a Zayra Rosales y a Antonio Martínez como se escucha fuertemente en radiopasillo? Porque eso sería ser aliado, lo que se sabe es de quién.
La del estribo. Poco o ningún ruido ha causado en Aguascalientes el que la periodista Lourdes Mendoza revelara las imágenes de la salidita de Emilio Lozoya al Hunan, para deleitarse con un pato laqueado… es natural, acá en la tierra de la gente buena estamos acostumbrados a que los peculadores sentenciados se paseen por la plaza, es más, hasta candidatos los hacen, ¿verdad, Luis Armando Reynoso Femat?
@PurisimaGrilla




