- Para detectar problemas emocionales, sicológicos y de adicciones en adolescentes de entre 12 y 16 años
- El 20% de los jóvenes evaluados tienen problemas familiares, en la escuela, mentales o consumen sustancias; se encuentran en riesgo de convertirse en adictos
El Instituto de Servicios de Salud del Estado de Aguascalientes (ISSEA), a través de la Coordinación Estatal de Salud Mental y Adicciones, ha realizado, hasta el mes de abril, tres mil 262 pruebas para detectar problemas emocionales, sicológicos y de adicciones en adolescentes de entre doce y 16 años de edad que cursan la secundaria.
Gerardo Macías López, director el área, refirió que este año se tiene una meta de doce mil 500 pruebas, la cual se tiene confianza podrá superarse ya que durante el año pasado se realizaron más de 17 mil 247 pruebas en todo el estado.
El cuestionario validado internacionalmente analiza nueve áreas de la vida, que permite identificar si la persona está pasando por algún conflicto. Fortaleciendo la prevención de las problemáticas sociales, estas pruebas se realizan en las instituciones de secundaria, debido a que dichos centros educativos albergan al 90% de los 250 mil adolescentes de Aguascalientes.
“Este tamizaje es un instrumento para conocer cómo se llevan las relaciones con diferentes grupos donde se ve mucha violencia; algo que también vemos mucho son los problemas de salud mental, la depresión y la ansiedad”. Destacó Macías López que en menor medida aparecen los casos de adicciones, sin embargo sí se han presentado.
Sumado a las evaluaciones, a todas las secundarias se les aplican talleres sobre autoestima, asertividad, disminución de violencia y prevención de adicciones, durante tres meses, tres días a la semana, por personal de sicología del Centro de Atención Primaria en Adicciones.
Juana María Muñoz González, responsable del Programa de Prevención en el Consejo Estatal contra las Adicciones, señaló que una vez que se realizan los tamizajes, el Instituto de Educación de Aguascalientes en conjunto con ISSEA dan un informe de las tendencias de los alumnos y los centros educativos para concretar intervenciones específicas, tanto en el entorno educativo como en el familiar y social del joven.
“Capturamos los resultados y nos indica en qué áreas de la vida sale mal el alumno, son 81 reactivos; el programa nos dice que de 34 puntos en adelante el chavo se considera un riesgo”.
El 20% de los jóvenes evaluados tienen problemas familiares, en la escuela, mentales o consumen sustancias y se encuentran en riesgo de convertirse en adictos. Como primer acercamiento se realiza una consultoría individual y a partir de ello se canaliza a las instituciones que puedan aportar la atención necesaria, “se realiza un trabajo de prevención hasta tratamiento intensivo”.
Aseveró que las pruebas reflejaron que la zona conocida como las colonias 7 Hermanas, al sur oriente de la ciudad, sigue siendo el polígono con mayor número de habitantes y mayor índice que jóvenes vulnerables ante las problemáticas de adicciones y violencia.
El coordinador estatal de Salud Mental y Adiciones refirió que en la mayoría de los casos donde se detecta un problema, es parte de una cadena, donde los primeros eslabones se encuentran en el hogar.
“Si hay violencia en el hogar, después se genera la ansiedad, después de la ansiedad viene la depresión, después viene ideación y luego intento de autodestruirse”, ante tan situación se extienden atenciones integrales para garantizar un beneficio, sin embargo, reconoció, un bajo porcentaje de las persona se mantienen en los programas.
Finalmente señaló que se ha apostado por las campañas de prevención a los jóvenes, capacitación a familiares y profesores para identificar posibles casos, así como la investigación de la mano de la Universidad Autónoma de Aguascalientes para ampliar la información y ofertar soluciones. “Nosotros creemos que si se trabaja en la prevención no se va a llegar a los problemas de salud mental, adicciones, y accidentes que conllevan las drogas”.
