- La provocación de la manifestación causó euforia en el representante del circo, quien exigía el retiro por la fuerza policial
- Cinco jóvenes y el diputado del PVEM, Gilberto Gutiérrez, fueron golpeados por personal del circo
Tras casi dos semanas de promocionar la manifestación vía redes sociales en contra de los circos con animales, la tarde de ayer poco antes de las 18:00 horas, alrededor de 40 personas, en su mayoría jóvenes, se presentaron frente al circo Atayde, ubicado en la avenida Aguascalientes, en el tramo correspondiente al fraccionamiento Boulevares, con pancartas y expresiones de desagrado hacia el maltrato animal en los circos. Minutos después de su llegada el representante del circo, Héctor Quiroz, salió a la defensa junto con su personal exigiendo control por parte de los elementos de seguridad pública municipal ya que se encontraban en un espacio privado (el pago de la renta del espacio incluye privacidad durante su estancia).
Entre los manifestantes se encontraban militantes del Partido Verde Ecologista de México (PVEM) y simpatizantes del movimiento contra los circos con animales, lo cual causó una gran molestia entre el personal del circo, quienes manifestaron vía micrófono lo siguiente: “¿Quieren hacer denuncias?, las esperamos. Nosotros vamos a ir con todo contra ese partido (PVEM). Señor Gutiérrez, no le tememos, desde el año pasado nos ha atacado. A ver si lo entiende: nosotros alimentamos, cuidamos y procreamos a los animales desde hace más de 100 años, ¿qué han hecho usted por los animales?, nada”.
Exaltado, el representante del circo le gritaba “sinvergüenza” al diputado verde ecologista por estar a favor de la pena de muerte en la plataforma electoral del partido, por lo que defender la vida de los animales es muestra de su incoherencia; dos elementos de seguridad municipal le solicitaron que guardara silencio y ya no generara más violencia con sus palabras, “estamos en terreno privado, ¿por qué ellos pueden manifestarse y nosotros no?”.
Una de sus peticiones hacia los elementos de seguridad era retirar a los manifestantes pues afectaban a su público, asustándolos, sin embargo ellos respondían que se trataba de una manifestación pacífica sin agresiones, por lo que si continuaba provocando violencia con sus palabras tendrían que llevárselo detenido. Héctor Quiroz decidió retirarse con el público expresando su molestia.
Mientras los policías dialogaban, los ánimos entre los manifestantes y personal del circo se elevaron hasta los golpes, causando presencia de sangre en cinco personas, entre ellas una joven, así como el diputado Gilberto Gutiérrez, quien aseguró que el personal del circo atacó con groserías y golpes a los manifestantes desde su llegada, jalando a varios jóvenes hacia el circo para agredirlos, “en el intento de defenderlos me tumbaron los dientes y a otros los descalabraron porque los agarraron a patines y puñetazos, no es justo y exigimos justicia”. En un inicio, los elementos de seguridad se negaban a detener a quienes señalaban como los golpeadores, por no haber observado el acto, sin embargo una vez que personal del Partido Verde les mostraron videos y fotografías, comenzaron a buscar a los responsables.
Los manifestantes ovacionaron el actuar de los policías; el personal del circo vociferaba que también se llevaran Gutiérrez Gutiérrez y los que los habían provocado. Sin oponer resistencia, el diputado subió a la patrulla junto con uno de los jóvenes golpeados, mientras que a los acusados de agresión se los llevaron en otro vehículo; en primer instancia los habían subido en la parte trasera, como si estuvieran ya detenidos, sin embargo la abogada del circo exigió que se cumplieran sus derechos pues aún no existía una denuncia como tal para ser tratados como delincuentes.
Mientras los manifestantes eran retirados, las personas que se encontraban fuera de la carpa del circo aseguraron que esta manifestación, más que haber sido a favor de los animales, fue un espectáculo para que el Partido Verde ganara público: “¿Por qué no van a los parques donde tienen muriéndose de hambre a los animales?”. “Este circo año con año muestra su cuidado y gran tradición, no sé por qué lo atacan”. “Es que deben entender que no sólo son los circos, también están los toros, los gallos, los perros, ¿por qué no hacen algo ahí?, por eso decimos que esto es sólo un movimiento político para llamar la atención”.
Una madre de familia del público que compró sus boletos, aclaró ser fiel seguidora de los circos desde niña y por tradición lleva a sus hijos y sobrinos, pero lo sucedido en este día fue muestra de la intolerancia que tienen ambos lados, pues ellos, como partido político y sociedad civil, no tenían por qué responder el ataque, mientras que como trabajadores del circo debieron atender sólo al público sin hacer caso a la manifestación, “mis niñas terminaron asustadas y hasta las aventaron, no aplaudo ni uno ni otro”.
A nombre del circo, los trabajadores aclararon que seguirán viniendo a Aguascalientes pues es una ciudad con un público muy asiduo e importante para su espectáculo, enfatizando en que si la población no estuviera de acuerdo con los circos con animales, no tuvieran ventas.
