- No existe un dispositivo legal que sea aplicable para decidir en qué centro estar
- Sexoservidoras presentan quejas sobre policías que las extorsionan y explotan
Tras haber consultado la Comisión Estatal de Derechos Humanos al Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación (Conapred) sobre el caso de la mujer transgénero llamada Vanesa que se encuentra recluida en el Cereso varonil, el ombudsman, Jesús Eduardo Martín Jáuregui, anunció que la respuesta llegó en tono negativo para el cambio de esta persona al Cereso de mujeres.
La Conapred dice que no existe un dispositivo legal que sea aplicable para que determine de forma general si debe estar en uno u otro centro, por lo que sugiere que con base en los principios de Yogyakarta (principios sobre la aplicación de la legislación internacional de derechos humanos en relación con la orientación sexual y la identidad de género), se le consulte y se verifique que se encuentre en condiciones de seguridad en estricto apego a los derechos humanos.
“Le preguntamos a ella personalmente y nos dice que se encuentra bien en el módulo aislado, también el general Eddy se comprometió a garantizar la tranquilidad de esta persona”, así es que, en tanto no cambie su situación jurídica, Vanesa seguirá recluida en el Cereso de varones.
El fin de la CEDH es que independientemente de que se legisle o no para que las personas transgénero cambien sus datos personales, se obliguen a los Ceresos a construir áreas especiales para casos de esta naturaleza, ya que las personas de la comunidad LGBTTTI son las más discriminadas y atacadas al interior de los centros penitenciarios.
Martín Jáuregui recordó la existencia de un antecedente no legislativo, pero sí aplicable: las recomendaciones de la Suprema Corte de Justicia de la Nación con su protocolo de atención a personas que están ejerciendo su libertad sexual, el cual es un indicativo para la Comisión y las corporaciones policiales para actuar en apego a los derechos humanos; “ya platiqué con ambos secretarios (estatal y municipal) sobre la necesidad de crear módulos especiales para estos casos y están de acuerdo”.
Y es que constitucionalmente las personas procesadas deben estar separadas de las sentenciadas, por eso es que Vanesa fue ubicada en el módulo aislado junto a tres personas más que intervienen en el caso, pero al momento de ser ya sentenciada deberá pasar al área común, “ahí es cuando entramos nosotros en la exigencia de adecuar un área aislada porque si no podría ser violentada gravemente”.
Hasta el momento la CEDH no ha recibido otros casos de esta naturaleza, sino quejas hacia las corporaciones policiales por hostigamiento y explotación a mujeres trabajadoras sexuales, “son muy recurrentes estas quejas, al parecer algunas patrullas aprovechan tiempos muertos y visitan otras áreas no correspondientes a las suyas para extorsionar a las sexoservidoras, así como a los clientes, ya que se trata de una actividad marginada y mal vista por la sociedad”.
Para este tema, el ombudsman ha realizado varias reuniones con el secretario de Seguridad Pública estatal y municipal (Aguascalientes) para hacer un cruce de información, sancionar a quienes practican este tipo de actos y erradicar este abuso a los derechos humanos de este sector. Después de haber tenido algunas diferencias de opiniones con ambos funcionarios, la CEDH logró crear un trabajo de cercanía y de común acuerdo.
