- La Orquesta Escuela Carlos Chávez interpretará obras del compositor fallecido el 5 de diciembre pasado y de Mussorgsky, con la dirección de José Guadalupe Flores
- Estreno mundial de la versión orquestal de la obra Betsabé, de Tino Contreras, quien participará en el concierto como invitado especial
Con el objetivo de celebrar la trayectoria y el legado de uno de los músicos más importantes del siglo XX en México, el Sistema Nacional de Fomento Musical (SNFM) del Conaculta realizará un homenaje al maestro Luis Herrera de la Fuente (Ciudad de México, 1916 – Íbid., 5 de diciembre de 2014), el próximo domingo 8 de marzo, en el Auditorio Blas Galindo del Centro Nacional de las Artes, donde la Orquesta Escuela Carlos Chávez, además de interpretar obras como Fronteras de este compositor y Cuadros de una exposición, de Mussorgsky, realizará el estreno mundial de la versión orquestal de Betsabé, original del reconocido músico de jazz Tino Contreras, quien participará en este concierto como invitado especial.
Guadalupe Flores dirigirá este concierto con el que el público disfrutará de la conjunción musical entre la Orquesta Escuela Carlos Chávez (OECCh) y los músicos que acompañarán a Tino Contreras durante la interpretación sinfónica de su obra Betsabé, que el célebre baterista de jazz deseaba estrenar con la dirección de Luis Herrera de la Fuente, anhelo que no se pudo materializar por el deceso del compositor.
“Siempre admiré al maestro Luis Herrera de la Fuente, en toda ocasión le mostré mi respeto. Su rítmica para dirigir era extraordinaria y su comunicación con la orquesta me conquistó desde la primera vez que lo vi en escena. Desde mi punto de vista fue una de las grandes glorias de la dirección en México”, expresó en entrevista Tino Contreras, quien recordó la forma en que el director y académico conoció su obra: “Coincidimos en una comida, ahí me acerqué y le canté las melodías; comenté con él sobre cómo y cuándo compuse esta obra concebida durante mi estancia en Estambul, capital de Turquía”.
Betsabé es una obra instrumental con escalas menores que aluden a los sonidos del oriente, a los escenarios que envuelven la historia de este personaje bíblico, señaló el también compositor de blues y música popular. “La versión sinfónica de esta obra es una simbiosis entre la música sinfónica y el jazz, será una comunión extraordinaria entre la Orquesta Escuela Carlos Chávez y los músicos que me acompañarán. Es una obra que conjuga la estructura del jazz (la improvisación) con movimientos de música sinfónica, que el público va a disfrutar mucho”, apuntó.
Víctor Manuel Herrera, hijo del fallecido director, compartió en entrevista que el estreno de la versión sinfónica de esta pieza de Tino Contreras se había proyectado en últimas fechas para realizarse en un homenaje en vida. “Mi padre murió y no se pudo concretar”, señaló.
Y al preguntarle si al maestro Luis Herrera de la Fuente le gustaba el jazz comentó que “él de joven tocó jazz, pero después de esa etapa sólo se dedicó a la música sinfónica. La ópera también fue otra de sus pasiones”.
Expresó su agradecimiento por este homenaje que el Sistema Nacional de Fomento Musical le rendirá a su padre y dijo que “más allá de los escenarios, mi padre fue un persona absolutamente disciplinada y trabajadora que dejó un legado único, porque fue de los pocos que se preocupó y ocupó en formar orquestas en México. Estaba convencido que la música humaniza a las personas”.
Comentó que para Luis Herrera de la Fuente, la música podía enriquecer la vida interior de las personas. “Con la Filarmónica de la Ciudad de México y cuando dirigió en Xalapa, realizaba conciertos en cárceles, plazas públicas y en pueblos más pequeños, pues su intención siempre fue la de abrir el horizonte de las personas, que conocieran otro tipo de música. De hecho en los centros de readaptación social los internos le llegaron a mostrar su agradecimiento de manera muy singular, besándole las manos o con preguntas como: ¿cobran lo mismo quienes tocan el violín que el triángulo?”
Sobre el quehacer de su padre como compositor, Víctor Manuel Herrera dijo que su catálogo no cuenta con un gran número de obras escritas, porque su carrera como director lo absorbió, sin embargo hay algunas muy conocidas como Fronteras –que será interpretada en este homenaje- o su Sonata para cuerdas. “La primera es quizá la más interpretada, la escribió en la línea de lo que se denomina como nacionalismo mexicano, que conjuga diversos sonidos típicos del país, la segunda se inscribe en la línea dodecafónica”.
También recordó que a Luis Herrera de la Fuente le encantaba dirigir las obras de Mahler (de hecho cuando debutó con la Orquesta Sinfónica Nacional dirigió la Sinfonía Titán). “Tchaikovsky, definitivamente fue uno de sus compositores favoritos, así como Mussorgsky, Ravel y Beethoven, de hecho en Spotify se puede escuchar la versión que él dirigió de La heroica de Beethoven”.
“Como persona, Luis Herrera de la Fuente fue un hombre encantador. A mí me enseñó a apreciar la pintura y la arquitectura, no sólo la música. Hasta el último suspiro fue un hombre con una gran variedad de intereses y de pasiones. Nunca dejó de leer -de hecho el día que murió leía un libro de Plutarco-; fue un gran lector, me enseñó a leer a Thomas Mann, Marcel Proust y en español por supuesto a (Jorge Luis) Borges, también le gustaba la poesía. Hoy que estuve en su estudio vi que tenía un libro de Gonzalo Rojas”, refirió.
El concierto homenaje a Luis Herrera de la Fuente se llevará a cabo el próximo domingo 8 de marzo a las 18:00 horas en el Auditorio Blas Galindo del Centro Nacional de las Artes.
Con información de Conaculta
