- Cada cinco años habrá necesidad de recurrir a medidas más severas
- Semarnat y Conagua revisaron los avances de Aguascalientes en esta materia
- El país está comprometido a reducir el 22 por ciento de sus gases con efecto invernadero, pero hay laxitud en el terreno de las entidades federativas
Aunque no se fijaron cifras, tanto la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) como la Comisión Nacional del Agua (Conagua) pidieron al Gobierno del Estado oficializar un compromiso en materia de reducción en la emisión de gases con efecto invernadero.
La maniobra fue necesaria, pues el renglón de las entidades federativas quedó indefinido pese a que el país asistió a la última Conferencia sobre Cambio Climático, celebrada en París.
En ese evento el Estado mexicano dijo se desharía del 22 por ciento de las emisiones.
El titular de la Semarnat, Rafael Pacchiano Alamán, señaló que cada cinco años habrá procesos de valoración, además de medidas cada vez más agresivas.
En Palacio de Gobierno apuntó que el proyecto de reparto de calentadores solares “traerá beneficios directos a más de 25 mil familias, con un ahorro de más de 800 millones de pesos, y también contribuye para la mitigación de gases de efecto invernadero en más de 172 mil toneladas de dióxido de carbono”.
Los cálculos de la administración local dicen que por cada calentador suministrado la población instala tres más a cuenta propia, tras reconocer los beneficios ecológicos y económicos que acarrea su uso.
Las autoridades además hicieron entrega de 25 concesiones para la explotación del agua a una serie de particulares: “La concesión planeada y ordenada de aprovechamiento nos encamina a la sustentabilidad hídrica, sumada a acciones como el tratamiento de aguas residuales y la recolección de agua de lluvia. Así avanzamos a que podamos garantizar una plena disponibilidad de agua para uso humano y su aporte para el crecimiento económico”.
De acuerdo con el funcionario federal, la capital del estado es una de las más exitosas de México en términos ambientales, producto de sus puntuaciones en tratamiento de aguas residuales y manejo de los residuos sólidos urbanos.
Destacó que en todo el país sólo Aguascalientes ha evitado los tiraderos a cielo abierto.
Roberto Ramírez de la Parra, director de la Conagua, también participó en la verificación de los avances de la política local en materia de cambio climático.
Contrario a lo que podría pensarse mencionó que la lluvia de los últimos meses es señal de que las cosas no marchan del todo bien, pues la precipitación histórica ya refleja un desequilibrio natural: “Eso significa que hay que prepararnos para lo contrario, así como tuvimos el mes y año más lluvioso en Aguascalientes, la posibilidad de una sequía más severa se incrementa con el tema del cambio climático. Es muy importante que tratemos de cuidar el agua hoy que tenemos abundancia”.
El gobernador Carlos Lozano de la Torre lamentó el anuncio de la Secretaría de Hacienda en lo tocante al recorte presupuestal 132 mil millones de pesos: “Desgraciadamente lo que van a provocar es que con menos hagamos más. Decirles que ojalá nos ayuden a concretar los proyectos que estamos haciendo en Aguascalientes”.
Durante la mañana la comitiva supervisó la obra de modernización de la Planta de Tratamiento de Aguas Residuales de Aguascalientes, hoy con capacidad para manejar dos mil litros por segundo. La infraestructura es una de las cinco más grandes del país. Se rehabilita para cumplir con los estándares de la Norma Oficial 003, superior en la materia. Está abierta la posibilidad de vender agua de reúso en grandes cantidades a la industria automotriz.
