- Los procedimientos se concentran en la población de 25 a 30 años
- Trasplantes deben ser gratuitos a la población joven
En gran parte de los pacientes receptores de riñón su organismo termina rechazando el órgano debido a que no se aplican los cuidados recomendados o se consumen los medicamentos pertinentes, aseguró Benjamín Gómez Navarro, presidente de la Sociedad Mexicana de Trasplantes, quien señaló que muchos pacientes tras recibir el trasplante pretenden retomar su vida de manera normal y en muchos casos llegan a ser omisos ante las recomendaciones médicas.
“La gente que se trasplanta piensa que ese día se acabó y ya es una nueva vida, pero ese día empiezan a buscar cómo voy a conseguir los medicamentos para mi trasplante. El 30 por ciento de los pacientes en que se pierden los injertos es por no adherencia al tratamiento”, explicó el especialista, quien destacó que los trasplantes llegan a fracasar debido a carencias económicas del receptor, “podemos decir que el diez por ciento es por la falta del medicamento, estamos hablando que el 33 por ciento, una tercera parte, es porque ya no tienen recurso económico para seguir adelante, el otro 66 por ciento es por no adherencia”.
Cabe indicar que la edad promedio de trasplantes en México es de 25 a 30 años de edad, razón fundamental por lo cual los receptores ignoran las recomendaciones para preservar el estado funcional del órgano injertado, “son gente muy joven que quiere seguir una vida como si no tuvieran trasplante, puede ser, su vida puede ser normal, pueden ir al antro, pueden fumar, pero hay límites normales y la gente no lo hace; tienen muchas desilusiones amorosas las mujeres y es el motivo principal por el cual no toman sus medicamentos; y en los jóvenes es el no permiso de ir a ciertos lugares o desaparecerse de su casa ocho días. Los problemas sicológicos son muy importantes, y es la cultura”.
Destacó el presidente de la Sociedad Mexicana de Trasplantes que dos mil 210 procedimientos en general fueron realizados en México durante el año pasado, no obstante, aún existen cerca de doce mil personas en lista de espera, por lo que los órganos más demandados son riñón, corazón, hígado, pulmón e intestino, pacientes que en gran medida son menores de edad, “es que lleguen a trasplantar a los niños en lista de espera antes de los seis meses como en Europa, en otros lugares. Que los riñones de personas de menos de 35 años sean primeramente dirigidos a los niños, no que el que tenga cinco años se dirija al de cinco años, los órganos de adultos jóvenes pueden ser para los niños, para que resolvamos el problema de la niñez”.
Además, destacó que de modificarse la legislación mexicana para facilitar el acceso de procedimientos de trasplantes a quien lo necesite, inclusive de ofrecerlos de manera gratuita a menores de 25 años, “que se llegan a trasplantar es porque son estudiantes que afortunadamente tienen seguro social; que el enfoque sea que todas las personas con necesidad de trasplante se puedan trasplantar”.
