- Contribuirá a esta situación la caída considerada del 10% del PIB
- El 50% de los empleos los integran los millennials y para el 2025 será el 75 por ciento
Según datos del Instituto Nacional de la Competitividad (IMCO) se avizora un panorama laboral difícil para los profesionistas millennials en los próximos años, explicó la integrante del Colegio de Economistas de Aguascalientes, Valeria López Falcón, a lo cual contribuirá la caída del 10 por ciento del Producto Interno Bruto provocado por la pandemia del coronavirus.
La economista dio a conocer una serie de datos que se generan alrededor de las profesiones y de cómo se conforma el mercado laboral, que señala que el 50 por ciento está conformado por millennials y para el 2025 será el 75 por ciento.
Se conoce como generación millennial los nacidos entre 1981 y 1993, quienes tienen como características que el 28 por ciento espera estar en su trabajo por más de cinco años, el 53 por ciento prefiere pasar el menor tiempo posible en la oficina al no ser su lugar de trabajo favorito y el 22 por ciento buscan espacios con una cultura de alta confianza en el trabajo para permanecer por más tiempo. Sus tres principales motivaciones son la remuneración económica y beneficios, las oportunidades de aprendizaje continuo y la flexibilidad laboral.
Según el IMCO se sigue asociando que a mayor preparación mayores ingresos, de tal forma que de bachillerato a licenciatura aumenta el 72 por ciento de percepciones y de licenciatura a posgrado el 62 por ciento; de igual manera una mayor educación se relaciona a una menor informalidad, de tal forma que al estudiar una persona la licenciatura disminuye el 50 por ciento de probabilidades de trabajar en el sector informalidad y el 13 por ciento entre quienes egresan de un posgrado.
La mayor concentración de la informalidad se conforma por quienes no estudiaron que es el 88 por ciento, para quienes estudiaron solo la primaria integran este sector el 78 por ciento.
Entre las carreras más estudiadas en el país está en primer lugar administración y gestión de empresas, seguida por contabilidad y fiscalización, en tercer lugar, la carrera de derecho.
Las carreras con mayor calidad de inversión en universidades públicas son: formación docente para educación básica a nivel primaria, para nivel secundaria y de formación docente para la enseñanza de asignaturas específicas; entre otras está matemáticas, negociación y comercio, electrónica, automatización y medicina.
Las carreras a las que se inscriben más mujeres a nivel universitario son las de formación docente para varios servicios educativos y las relacionadas con atención social, esto debido a que aún no existen incentivos para que se integren a áreas de estudio distintas como ingenierías y las relacionadas con las llamadas “ciencias duras”.
La brecha salarial entre hombres y mujeres persiste también a nivel posgrado, pues mientras un hombre percibe 21 mil pesos mensuales, la mujer gana menos de 16 mil pesos.
Las carreras a las que ingresa la mayor cantidad de hombres son las relacionadas con ingenierías automotrices, barcos y aeronaves, electricidad, generación de energía, electrónica y automatización.
Las carreras con mayor porcentaje de desempleados son: ingenierías vehículos, motor, barcos y aeronaves, terapias de rehabilitación y tecnologías de la información y la comunicación, negocios y comercio, criminología, trabajo y atención social, sicología, manufacturas y procesos, orientación y asesoría educativa, finalmente las de diseño.
Con mayor porcentaje de informalidad se encuentran las carreras de terapia de rehabilitación, técnicas audiovisuales, producción de medios, música y artes escénicas.
Las mejores pagadas son medicina, con un promedio mensual de 17 mil 400 pesos, electrónica y automatización con 15 mil pesos seguido por ciencias ambientales con un promedio de 14 mil 300 pesos. Las peores pagadas son ciencias políticas, criminología y diseño.
