- Son 20 las que consideran pueden tener riesgo inmediato de colapsar
- Las supervisiones las realiza Sedum y Protección Civil Municipal
Se intensifican las revisiones en aquellas construcciones que puedan tener riesgo de colapso por la humedad generada en esta temporada de lluvias, al cuantificarse 140 fincas registradas en el padrón de la Secretaría de Desarrollo Urbano Municipal (Sedum).
El titular de la dependencia, Jaime Gallo Camacho, detalló que se realiza un monitoreo permanente de la mano de Protección Civil en aquellas fincas con riesgo de colapso y que este monitoreo se realiza además, con apoyo de los colegios de ingenieros civiles, arquitectos, urbanistas y peritos valuadores.
“Cuando se detecta una finca que está en riesgo y es urgente la intervención, lo que hacemos es programar una visita inmediata de un perito especializado para definir si es por daños a las estructuras o por razones de mantenimiento y asegurar que se garantice la integridad de las personas y familias que viven en este entorno y pueda representarles un riesgo”.
El padrón de 140 fincas las ubica principalmente en el centro de la ciudad y lugares colindantes a los barrios tradicionales, normalmente se tratan de fincas antiguas, por ello la importancia de que sean monitoreadas de forma constante, pues en muchas ocasiones los dueños no pueden continuar dando mantenimiento y los factores de riesgo se incrementan.
Actualmente, son 20 las que consideran que pueden tener un riesgo más inmediato de colapsar, aunque puede no tratarse del total de la construcción, sino de una barda, fachada o un cuarto, y que, generalmente, son las que más atención demandan, aunque también están abiertos a la denuncia ciudadana, lo que permite actuar de forma más eficiente.
Gracias de los reportes de la ciudadanía recientemente se identificaron 14 fincas localizadas en las colonias del Carmen y San Pablo y la Altavista, así como en el Barrio de San Marcos, en donde las construcciones son muy antiguas y con bajo mantenimiento: “Generalmente se tratan de fincas edificadas en el siglo pasado, quizás con materiales y estructuras que no representan ni valor histórico ni artístico, pero como se tratan de voluntades de propiedad privada, no es posible intervenir sin la voluntad de un particular, lo que hacemos es que, cuando existe riesgo es a través de un dictamen de Protección Civil es posible argumentar protección a la población e intervenir con Obras Públicas para proceder a una demolición”.
El año pasado fueron cuatro las intervenciones que se realizaron en cuatro bardas y fachadas de fincas antiguas con el fin de garantizar la integridad de la población.




