MADRID.- El gobierno de España anunció este viernes nuevas medidas para contener el repunte de los casos de coronavirus que están registrando diversas regiones, entre ellas el cierre del ocio nocturno en todo el país y la prohibición de fumar en espacios públicos sin una distancia mínima de dos metros.
Después de una reunión de carácter extraordinario del Consejo Interterritorial de Salud donde participan el gobierno central y todas las comunidades autónomas, el ministro de Sanidad, Salvador Illa, anunció once medidas de obligado cumplimiento en todo el país y tres recomendaciones.
Las acciones fueron consensuadas para poder frenar la expansión del covid-19, que de los mil 600 contagios registrados el miércoles pasó en solo 24 horas a los 3 mil, lo que obligó a la convocatoria de esta reunión extraordinaria.
La medida para detener todas las actividades de ocio nocturno, como las discotecas de todo España, representa la paralización de la actividad de 25 empresas que dan trabajo a 200 mil personas.
Los representantes del Consejo Interterritorial de Salud acordaron la obligatoriedad para que bares y restaurantes cierren a la una de la madrugada y durante sus horas de atención no podrán acoger a grupos de más de diez personas.
Se acordó que a todas las personas que viven en geriátricos y los que acuden a centros socio-sanitarios se les realizarán pruebas de diagnóstico PCR (Reacción en Cadena de la Polimerasa, por sus siglas en inglés), así como al personal que vuelva de vacaciones o nuevos empleados.
Gobierno y comunidades también acordaron limitar las visitas a las residencias de ancianos a una persona por interno y con una duración máxima de una hora.
También se tendrá que hacer una pormenorizada evaluación previa de cada evento multitudinario para determinar el nivel de riesgo.
Otra medida fue reforzar los controles policiales para impedir el consumo de alcohol en la calle, ante las crecientes reuniones de jóvenes bebiendo en parques o calles céntricas.
El ministro Illa recordó que el consumo de alcohol en la vía pública ya estaba prohibido, por lo que los ´botellones´ (así denominados por los jóvenes españoles) no están permitidos. El acuerdo unánime fue estrechar la vigilancia de este tipo de actos y aplicar de forma más estricta las sanciones acordadas.
Se determinó como obligatorio hacer un cribado con PCR entre los grupos y personas de mayor riesgo que hayan estado potencialmente expuestas al virus.
Las recomendaciones acordadas son limitar los encuentros sociales fuera de sus compañeros de convivencia habitual y que los encuentros se limiten a un máximo de diez personas.
A las comunidades se les instó a realizar periódicas pruebas PCR entre los trabajadores de centros socio-sanitarios que estén en contacto directo con residentes.
En la rueda de prensa, el ministro Illa destacó el acuerdo histórico, porque las medidas se tomaron por unanimidad.
Explicó que este es un acuerdo de mínimos porque adicionalmente cada comunidad podrá ampliar las restricciones si lo considera necesario.
