- Todavía no se compone el panorama económico del servicio de transporte público ocasionado por la vigente pandemia
- Los choferes eligen trabajar más para poder obtener sustento
Aunque dentro de la “nueva normalidad” posterior al confinamiento estricto de la pandemia por Covid-19 se ha notado una movilidad cada vez más evidente, las ganancias para los taxistas siguen todavía sin arrancar, pues ahora tienen que hacer jornadas de 12 horas para compensar la remuneración que en otros tiempos hubieran obtenido en un periodo más corto de trabajo. Así lo explicó Milton Álvarez García, representante de la agrupación Acataxi y uno de los miles choferes de taxi que hay en el estado: “Nos hemos visto mermados. Yo soy chofer. Yo como chofer le digo que, pues, tenemos que trabajar lo doble para poder sacar los gastos y cubrir los de la casa y los del vehículo”, compartió el conductor.
Incluso mencionó que hay dueños de concesiones de taxis que han tenido que guardar los autos por una o dos semanas porque sus choferes dejaron de trabajar por lo complicado que está todavía el panorama: “Sí está algo delicada la situación, pero no por eso dejamos de trabajar”.
Milton Álvarez García explicó que ni siquiera los días de quincena terminan siendo totalmente favorables para un conductor de taxi, ya que, aunque sí hay más movimiento, durante la pandemia la sociedad generó deudas que ahora está pagando y eso repercute en lo que pudieran gastar en servicio de taxi.
“No hay pasaje ni en la quincena”
En su experiencia, señaló que antes de la pandemia él trabajaba nueve horas, lo que equivale a un turno, no obstante, en esta supuesta “nueva normalidad” necesita trabajar al menos 12 horas o hasta dos turnos, para poder equiparar la entrada de dinero que antes tenía.
“Hay compañeros que trabajan 14 horas, otros 16”, pero todo depende del chofer y la percepción que necesite acumular, tomando en cuenta que si el coche conducido no es propio, se tienen que solventar los gastos de liquidación, gasolina y alimentos durante la jornada.
En un fin de semana se han llegado a guardar hasta 100 unidades por la escasez de trabajo, estimó Álvarez García, y éstas vuelven a las calles con la rotación de los choferes que sí están trabajando. El que no estén abiertos los parques, panteones o que no haya eventos de cualquier índole, es lo que más ha golpeado a este sector, pero, por otra parte, las autoridades gubernamentales han tenido que recurrir a estas restricciones.




