APRO/Arturo Rodríguez
El caso de la médica Mariana Dávalos, motivó ayer una admisión desde el Gobierno Federal.
“Falta un largo camino por recorrer y erradicar la violencia contra las mujeres”, dijo la secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero.
La funcionaria, a cargo de las conferencias de prensa matutinas mientras el presidente Andrés Manuel López Obrador se recupera de covid-19, expresó que ya intervienen las agencias federales, la Comisión para Prevenir y Erradicar la Violencia contra las Mujeres y el Instituto Nacional de las Mujeres.
La joven Mariana Dávalos realizaba su servicio social en la comunidad Nueva Palestina, en Ocosingo, Chiapas, cuando denunció un abuso sexual. Nadie le dio seguimiento a su denuncia y entonces decidió quitarse la vida. El caso fue considerado indignante para la Secretaría de Salud, que ha reiterado la obligatoriedad en la aplicación de protocolos.
Apenas el miércoles, Sánchez Cordero encabezó junto con la secretaria de Seguridad, Rosa Icela Rodríguez, un plan de seguridad cuyo propósito es avanzar en la erradicación de la violencia contra las mujeres que entre sus puntos más destacados incluyó la colaboración entre los diferentes órdenes de gobierno.
Al referirse al caso, reiteró que diario revisan la violencia de género en el Gabinete de Seguridad y agregó: “En el caso de Mariana, por supuesto que hemos insistido en esta estrecha comunicación con las autoridades de Chiapas, en relación del caso, que sea investigado con perspectiva de género”.
La funcionaria consideró que emplear una perspectiva de género en la investigación y atención de casos, puede generar resultados muy diferentes en las investigaciones.
Además, lanzó un exhorto a los gobiernos municipales y estatales para que tengan sensibilidad ante denuncias, que eviten la revictimización de las mujeres o enviarlas a sus casas dejándolas a su suerte.
Ante el caso de Mariana Dávalos, Sánchez Cordero consideró que es indicativo del largo camino por recorrer en el combate y la erradicación de la violencia de género.
