A unos días de las elecciones en seis estados de la República que elegirán nuevo titular del gobierno estatal, de acuerdo a diversas encuestas, el Movimiento de Regeneración Nacional no se va a llevar todas las gubernaturas y, al momento, sólo mantiene una ventaja evidente en tres estados (Hidalgo, Oaxaca y Quintana Roo), en Tamaulipas, por el clima de inseguridad las encuestas no arrojan datos confiables, mientras que en Aguascalientes y Durango, los candidatos de la coalición entre PAN-PRI-PRD llevan ventaja sobre el resto de los partidos. Morena no podrá cumplirle al presidente Andrés Manuel López Obrador con entregarle estas entidades a la Cuarta Transformación.
Una vez pasada la elección, los morenitas tendrán que entregar cuentas acerca de las formas y métodos con que intentaron echar a andar la maquinaria electoral de ese partido en apoyo a los candidatos, porque al inicio de este proceso electoral la Oposición sólo veía oportunidad de ganar un estado, Aguascalientes, y en muy poco tiempo, los de Morena permitieron a sus adversarios cerrar la contienda y ya sólo tener seguro el triunfo en 3 entidades.
Una de las tácticas a revisar por los morenitas será la de enviar a los estados a funcionarios y gobernadores de la Cuarta Transformación en apoyo a sus candidatos; en procesos anteriores les funcionó que López Obrador visitara o hiciera referencia a las entidades donde había elecciones para que sus simpatizantes intuyeran quién era el elegido y por quién debían votar; en el 2022, el presidente ha intentado respetar estas seis elecciones y, en su lugar, los de Morena eligieron usar representantes de su gobierno, en los seis estados Morena ha placeado a miembros del gabinete obradorista con un doble propósito, mostrar el apoyo al candidato local y dar baños de pueblo a los posibles sucesores del presidente, las corcholatas que López Obrador ya destapó.
En los mítines, a todas esas corcholatas les han gritado “presidente”, no importa si es Marcelo Ebrard, Adán Augusto López, Rocío Nahle García, o la favorita del profesor: Claudia Sheinbaum, el morenaje no escatima en loas, en una clara señal de que el lopezobradorismo duro votará a quien designe el presidente como sucesor, por eso da igual si es el canciller, el secretario de Gobernación o la jefa de gobierno de la Ciudad de México quien acompaña al candidato local, aún no es 2024 y para todos alcanza el amor por la Cuarta Transformación.
Para los electores, 2024 aún está lejos, en especial en estas entidades donde se juega un gobierno mucho más cercano que el poder que se ejerce desde el Gobierno Federal, sin embargo, tanto Morena como la Oposición jugaron las fichas del turismo electoral, no hubo fin de semana en que, en los seis estados, se presentara una “figura nacional”, una corcholata o un miembro distinguido del bloque opositor para brindar su apoyo a los candidatos a la gubernatura.
Insisto en que hay una visión chilangocéntrica de la política que inhibe mejora las prácticas de los partidos políticos en las entidades federativas, porque antes que fortalecer los liderazgos locales y establecer mejores formas de comunicación y representación con la base social de cada estado, se cree que hay que placear a un miembro de la clase política que trabaja en la Ciudad de México o que ya gobierna otro estado, para fortalecer una candidatura local.
En el caso de la oposición, es evidente la desesperación por crear la imagen de que solamente la unión de todos los partidos en contra de López Obrador logrará ganar la sucesión presidencial; en el caso de Morena, se descuidó el trabajo local para darle prioridad a la exposición de sus posibles candidatos en el 2024.
El costo de esta estrategia se podrá analizar después del 5 de junio, cuando se pueda evaluar la influencia de esos turistas electorales que visitaron seis estados, tanto para la Oposición como para Morena, los resultados darán cuenta que su influencia fue inútil al momento de que los electores decidieron su voto, las victorias y derrotas estatales serán resultado del desempeño de los candidatos, ninguno de los distinguidos visitantes durante las campañas se podrá abrogar algún voto.
Después del 5 de junio se podrá evaluar si vale la pena que se siga gastando en ese turismo electoral que, desde la Cámara de Diputados, el Senado y la administración federal promueve las visitas a los estados.
Coda. Lo anticipa la canción “People are strange” de The Doors: “When you’re strange/ Faces come out of the rain/ When you’re strange/ No one remembers your name”-
@aldan




