- Descartan que lleguen los tan esperados componentes electrónicos en este 2022
- Trabajadores de Nissan y Compas comenzaron a migrar a otras empresas
A decir de Rogelio Padilla de León, Secretario General del Sindicato de la Industria Automotriz, los paros técnicos en las dos plantas de Nissan y Compas serán la tónica a lo largo de este año, pues descartan que, al menos lo que resta del 2022, será posible contar con los componentes electrónicos necesarios para que se reactiva la producción en el 100% de la capacidad instalada.
“Tenemos todavía una serie de desabasto de componentes, contracciones en el mercado, además que se suman otras situaciones como la escasez de acero, plásticos y aluminio que son materias primas…yo creo que todo el año vamos a tener que seguir viviendo con esto, este año se va a cerrar con la misma tónica, ya lo que queremos es que no empeore”, sentenció.
Anunció que vienen más paros técnicos para el mes de julio, al ser el ordinario que hace la armadora Nissan por los cambios de modelos, lo que representan al menos 10 días en los que las máquinas estarán detenidas; mientras que en este mes se proyectan paros parciales de 5 a 8 días, que ha sido la dinámica de cada mes desde enero.
Destacó que en el caso de los componentes electrónicos en su mayor parte se elaboran en países asiáticos, al igual que las materias primas, además que el costo del acero se incrementa de manera importante, y con ello los costos de producción; todo lo cual trae como consecuencia que sean constantes los paros técnicos, dado que la producción que se ha generado en lo que va del 2022 bajó hasta un 60% con relación a la capacidad instalada de cada una de las empresas, lo que también provoca un desajuste en el ámbito financiero con problemas muy fuertes.
“Las empresas no están ganando lo que tenían presupuestado, no están vendiendo para tener el flujo suficiente para cubrir los costos que genera la misma producción”, expuso el líder sindical.
Subrayó que en el caso de los trabajadores ya se están acabando los días de vacaciones con los cuales era posible intercambiar los paros técnicos y de esa manera no ver mermado su ingreso, especialmente para aquellos que tienen una mediana antigüedad de alrededor de 5 años, es por ello es que se han manejado otros esquemas para afectar lo menos posible los bolsillos del trabajador, como que puedan elegir si toman o no las vacaciones para que su salario llegue completo; la otra es que en los paros técnicos, ya de manera generalizada, se pagan al 50%, lo cual genera una problemática muy fuerte.
Esta situación ha llegado a pegar de manera importante en los trabajadores, a tal grado que algunos ya buscan realizar una segunda actividad laboral para completar sus ingresos, especialmente quienes viven en los municipios del interior donde hay actividad agrícola o ganadera, aunque aseveró que son los menos.
Otra situación que se presenta es que, debido a que los trabajadores se cansan de las condiciones que provocan los paros técnicos, deciden renunciar y se van a empresas aunque ganen menos salario, que para ellos sigue siendo más cantidad que el 50% de Nissan o Compas, “se está generando mucha rotación, los trabajadores se están yendo a las empresas donde no hay paros”.
