Con 389 votos a favor y 65 en contra, la Cámara de Diputados aprobó en lo general y particular una reforma histórica que busca dignificar el trabajo de miles de repartidores de plataformas digitales en México. Esta modificación a la Ley Federal del Trabajo (LFT) marca un antes y un después en la vida de quienes, día a día, recorren calles entregando pedidos.
La reforma propone garantizar los derechos laborales y la seguridad social de este sector, que durante años operó sin un marco legal que los protegiera.
¿Qué implica esta reforma?
La reforma está diseñada para que los repartidores que trabajan en plataformas como Uber, DiDi o Rappi puedan acceder a los mismos beneficios que otros trabajadores formales. Esto incluye:
- Seguro social, que cubra enfermedades, invalidez y más.
- Vacaciones pagadas, esenciales para garantizar descanso y calidad de vida.
- Aguinaldo, un derecho fundamental en México.
- Reparto de utilidades, que les permita compartir las ganancias de las empresas.
- Prima vacacional, un ingreso extra durante sus periodos de descanso.
- Atención médica inmediata en caso de accidentes laborales, algo vital para quienes enfrentan riesgos en la calle.
Además, la reforma establece que el Centro Federal de Conciliación y Registro Laboral (CFCRL) será el encargado de supervisar los contratos y de sancionar a las plataformas que no cumplan con sus obligaciones.
¿Por qué es tan importante este cambio?
Hasta ahora, los repartidores de apps eran considerados trabajadores independientes, lo que significaba que no tenían acceso a prestaciones ni seguridad social. Este modelo los dejaba completamente desprotegidos frente a accidentes, enfermedades y otras eventualidades.
La reforma busca terminar con esta precarización laboral al reconocer a los más de 650 mil repartidores como empleados formales, con todos los derechos que ello implica. Esto no sólo les brinda una mayor estabilidad, sino que también les permitirá mejorar su calidad de vida y planificar su futuro.
Se trata de un paso necesario para equilibrar la balanza entre el crecimiento de la economía digital y los derechos de quienes hacen posible su funcionamiento.
¿Cuándo comenzará a entrar en vigor?
Por ahora, debe pasar al Senado, donde se espera una rápida aprobación. Una vez publicada en el Diario Oficial de la Federación, la reforma entrará en vigor tras 180 días.
