La batería que debía impulsar el futuro eléctrico de Nissan se ha convertido en una alerta de seguridad. La Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) y Nissan Mexicana han emitido una alerta conjunta que afecta a 7,190 unidades del modelo Kicks E-Power, correspondientes a los años 2023 y 2024. El problema radica en una anomalía en el funcionamiento de la batería de iones de litio, cuyas fluctuaciones erráticas podrían dejar al vehículo completamente inmovilizado, aumentando el riesgo de accidentes en carretera.
El defecto no es menor: la batería puede bajar súbitamente de carga durante la aceleración o incluso cuando el auto está detenido. Durante la regeneración, en vez de cargarse adecuadamente, el sistema eleva la carga de forma anómala. Este comportamiento desata el “modo protección” del vehículo, con mensajes como “Potencia reducida” y el ícono de una “tortuga”, señal de advertencia que indica la pérdida de potencia inmediata. En condiciones de tráfico urbano o vías rápidas, esta inmovilización puede poner en peligro tanto al conductor como a terceros.
Frente a este riesgo, Nissan ha anunciado una campaña de revisión sin costo, que consistirá en la actualización del software del controlador de la batería. La automotriz se comprometió a contactar directamente a los propietarios de estos vehículos a través de llamadas, correos electrónicos, mensajes de texto y correspondencia domiciliaria.
Además, quienes sospechen que su unidad puede estar afectada —y no hayan sido contactados— pueden acudir directamente a la Red de Distribuidores Nissan o establecer contacto a través de los canales oficiales: el teléfono 800 9 NISSAN (647726), el correo electrónico contacto.nissan@nissan.com.mx, o la página web www.nissan.com.mx
Profeco, por su parte, indicó que vigilará el cumplimiento de las acciones correctivas y puso a disposición sus propios canales de denuncia y orientación: el Teléfono del Consumidor (55 5568 8722 y 800 468 8722) y sus redes sociales oficiales. También invitó a los consumidores a mantenerse atentos a las alertas rápidas que se difunden en sus plataformas digitales.
Este episodio no solo evidencia la importancia de los sistemas de protección en vehículos eléctricos, sino que también abre interrogantes sobre los protocolos de calidad en una industria en transición. En tiempos donde el litio es el nuevo petróleo, el desempeño de las baterías no solo define la movilidad: también pone a prueba la seguridad del presente.
