Cátedra
Poesías líricas
He cantado a las aguas
que siempre me han acariciado
sin exigirme nada…
He cantado a los cielos
que me dan, cada día,
en un diáfano obsequio
maravillosas tardes…
He cantado a la tierra
que me ofrece constante
caminos nuevos y paisajes faustos.
He cantado también a la tristeza
porque llega preciso en los momentos
en que todo parece abandonado.
A soledad, mi novia Soledad,
la que nunca me pide nada en cambio,
para ella mi canto
cada tarde es mejor.
Al Amor he cantado
muchas veces
con profunda dulzura y sentimiento
y una gran ignorancia…
al Amor…
– o 0 o –
“Por la unidad en la diversidad”
Aguascalientes, México, América Latina




