Mientras Rita Segato se preparaba para una rueda de prensa en la Feria Internacional del Libro de Guadalajara (FIL), esperaba un encuentro más cercano, sin saber que iba a dejar una larga fila de personas esperando por su libro firmado por ella misma.
Rita Segato es una escritora, antropóloga y activista feminista nacida en Argentina, hasta que lo abandonó en 1975. Su vida actualmente se encuentra dividida en dos hogares: Brasilia, que se convirtió en su refugio durante su exilio por más de 30 años y Tilcara, ubicada en la cordillera de los Andes, la última provincia argentina en la frontera norte con Chile.
No es desconocida ante México. Antes, había participado en la edición de 2021 en la misma FIL, presentándose en la mesa de diálogo “Contra la pedagogía de la crueldad: la experiencia vincular y comunitaria de las mujeres”. Esta vez, fue acompañada por Olimpia Coral, Susana Harp y John Ackerman, quien moderó la conferencia “Democracia y crisis civilizatoria: territorios, pedagogías y mundos posibles.”
Durante ese periodo, reflexionó sobre los feminicidios ocurridos en Ciudad Juárez, proponiendo un punto clave: la violencia contra las mujeres es una manifestación del patriarcado, del deseo de poder, de la debilidad de quiénes la ejerecen. Y en ese sentido, las cosas no han cambiado demasiado.
“Un gran error del feminismo es tratar la violencia contra las mujeres como defectos morales de los hombres, como problemas del libido o del deseo, cuando en realidad se trata de una orden de poder: la del patriarcado.” Declaró con firmeza durante su participación en la FIL Guadalajara.
A su vez, explicó que los hombres matan y violan para mostrar a otros hombres que son hombres. Defendió que todas las revoluciones han fracasado. Señaló que Javier Milei es una vergüenza nacional y reconoció que es difícil mantener la esperanza, sobre todo al voltear a ver el genocidio palestino que está cometiendo Israel en tiempo real: “Palestina nos lleva a todos. Si se puede hacer eso allá desde que se fundó el Estado de Israel, se puede hacer en cualquier lugar del mundo. Nadie se salva”.
Pero Rita Segado no baja la cabeza. Mediante teoría feminista, decolonial y un lenguaje accesible para todo el público, nos anima a involucrarnos a nivel profundo en estas luchas. Además, plantea una alternativa para llevar a cabo estas frustraciones: recurrir a la poesía. “El uso suelto de la lengua quizá sea la única forma.” Señaló durante la mesa, donde se encontraba presentando “El camino de regreso”, su libro más reciente que reúne todos los poemas que escribió durante las últimas décadas.
Ante el contexto cultural, social y político actual en donde ha surgido más de un intento por frenar los avances del feminismo, la histórica autora sonríe y nos recuerda: “Ellos, con sus grandes e inteligentisimas asesorías, se han dado cuenta que la politicidad de las mujeres amenaza sus proyectos.” Y planeamos que se mantenga así.




