- Necesario un “modelo de cultura que nos haga sentir más mexicanos”: candidato
- Resulta lamentable que se premie la mediocridad y se castigue al talento, aseguró
Trabajar desde el Senado de la República un replanteamiento y reorganización de la política cultural con sentido nacionalista en este país, fue la propuesta de Isidoro Armendáriz García, candidato del PRI a la Cámara Alta.
Explicó que para replantear una política cultural de Estado necesariamente se debe revisar el contexto nacional, cuáles son las debilidades y fortalezas, y la infraestructura que se requiere. “No se trata de decir de la noche a la mañana, hágase la cultura, hágase la expresión cultural, fomenten las actividades del teatro, de la pintura, de la poesía, de las clásicas o de tantas manifestaciones, si no tenemos los contenidos culturales, por un lado, que nos reivindiquen; y por otro lado, si no tenemos los instrumentos y los mecanismos para potenciarlos”, indicó.
Estableció que “es el momento en México de cambiar a un modelo de cultura que nos haga sentir más mexicanos, más enteros, más contentos, sin dejar de lado la cultura universal y sin limitarles el mundo en materia de pensamiento, conocimiento, ciencia y tecnología, pero comenzando por la cultura prístina enfocada a nuestras raíces”. Agregó a esto que los candidatos tienen que hacer un alto en el camino para analizar el tema de conciencia, cultura e identidades nacionales.
Lamentó que en México, en los últimos años, se ha premiado a la mediocridad y castigado al talento, por lo que el nuevo planteamiento cultural de México deberá revertir esa lógica, comenzando por la selección de mejores legisladores en la comisión correspondiente, quienes deberán saber del tema y les apasione, que hagan un apostolado de la cultura en el Congreso de la Unión, y desde ahí le exijan al Ejecutivo la implementación de la política de Estado que deberá conllevar presupuesto necesario, coordinación interestatal y priorizando a los municipios.
Isidoro Armendáriz sentenció que se requiere un plan cultural total que tome en cuenta los supuestos básicos de las necesidades sociales que están tipificados y ampliados en las recientes reformas al Artículo 1 de la Constitución General de los Estados Unidos Mexicanos y que para garantizar su cumplimiento implicará una revisión estructural de todo el aparato gubernamental.




