Faltan escasos días para que el Presidente electo, Enrique Peña Nieto, tome posesión como titular del Ejecutivo Federal. Mientras tanto, su equipo de transición se ha dado a la tarea de conocer con más detalle el estado en el que se encuentra el país y de generar propuestas para el siguiente gobierno. En materia de seguridad y justicia, la labor que enfrentan es bastante compleja no solamente por la dificultad asociada al entendimiento del fenómeno delictivo, de sus causas y sus efectos, sino por la urgencia de resolver el problema de violencia que se vive en el país desde hace seis años y que parece no mermar.
¿Cuál es la ruta a seguir? La respuesta no es sencilla. Hay muchos diagnósticos que nos dicen que lejos de reducirse, la inseguridad va en aumento y se está expandiendo. ¿Esto evidencia el fracaso de las medidas implementadas durante el sexenio por concluir? No necesariamente. En el Congreso fue aprobada la normatividad que contribuye al fortalecimiento institucional. Por ejemplo, la Reforma al Sistema de Justicia Penal y su implementación contribuirán a mejorar los procesos de justicia en nuestro país. Asimismo, el fortalecimiento de las instituciones encargadas de la seguridad pública de nuestro país ha sido, sin duda, un elemento clave para generar un sistema que funcione mejor. Las medidas adoptadas para fortalecer a la Policía Federal y al Sistema Penitenciario Federal seguramente han generado réditos. Sin embargo, no han sido suficientes para mejorar la situación de seguridad.
El sistema de seguridad y justicia está compuesto de varios eslabones que comprenden la prevención, investigación, persecución y sanción del delito. Las instituciones que inciden en estas labores son muchas y forman parte de los tres poderes de la Unión y de los tres órdenes de gobierno. En otras palabras, la seguridad pública es un asunto de responsabilidad compartida. Hasta ahora sólo se ha fortalecido una parte de la maquinaria. Para que funcione mejor, hay que atender todos los engranes.
Uno de los puntos que se tendrían que abordar es el fortalecimiento de la vinculación y coordinación de las distintas instancias y niveles de gobierno, así como el esclarecimiento de las responsabilidades que corresponden a cada una. En esta tarea es esencial la labor del Congreso Federal y de los congresos locales, así como de las dependencias y entidades de la Administración Pública Federal encargadas de la coordinación con estados y municipios. Es vital que los Congresos Federal y locales armonicen las normas y generen un marco legal que ayude a mejorar el funcionamiento de las instituciones, que éstas cuenten con responsabilidades mejor definidas y que no se traslapen con las de otras instancias. Asimismo, es esencial que las instancias encargadas de la coordinación cuenten con facultades que les permitan desempeñar su labor con más eficacia. Para lograr lo anterior, es necesaria la intervención de los legisladores así como la voluntad política de los funcionarios de las Administraciones Públicas Federal y locales. El éxito depende de la disposición a arreglar el problema de los funcionarios de todos los órdenes de gobierno.
También se tendrían que observar las causas de la inseguridad y la violencia, mismas que trascienden el ámbito del sistema punitivo, representado por el sistema de seguridad y justicia. Por ejemplo, atender las condiciones sociales y económicas que favorecen las actividades delictivas, así como enfocar políticas públicas en los grupos que con mayor probabilidad pueden caer en este tipo de conductas (los perpetradores), así como en las víctimas, tanto directas como indirectas. Por tanto, si el próximo Presidente quiere ser exitoso en su labor, tendrá no sólo que enfocarse en el fortalecimiento institucional sino que deberá persuadir a gobernadores, presidentes municipales y legisladores de comprometerse a fortalecer las instituciones de seguridad y justicia, de vincularse y de coordinarse para llegar a un mejor puerto. Asimismo, tendrá que empezar a atender las causas de la inseguridad y no sólo enfocarse en atender los efectos.
Leticia Ramírez de Alba Leal
Coordinadora del Programa de Seguridad Pública de México Evalúa
Twitter: @mexevalua
