Vienen de frente gigantes de azul,
con las bocas llenas de su democracia.
Pero el miedo ha dejado de ser la actitud,
suena en cada cabeza un hermoso runrún.
Nos quieren en soledad, nos tendrán en común…
Runrún – Nacho Vegas
La inconformidad sobre la forma desarticulada de la realidad, y el modo pendenciero que el titular del ejecutivo ha tenido para llevar a la práctica sus buenas intenciones, ha calado en muchos sectores de la población nacional. La caída en los niveles de aprobación popular con el actual gobierno no es un secreto para nadie, y el cúmulo de personas que campaña tras campaña apoyaron al actual presidente, y hoy se arrepienten, es cada vez mayor. Que un presidente sea criticado, es sano para la democracia; que haya segmentos sociales manifestando su inconformidad hacia el gobierno, es lo deseable en cualquier república. Que existan los mecanismos legales y cívicos para la expresión de las discrepancias, es indispensable.
Sin embargo, esa misma exigencia cívica debe ser operacional para todos, tanto para quienes detentan el poder, como para quienes critican su ejercicio. Por ello, llama la atención el levantamiento de una movilización “ciudadana”, de clara tendencia elitista, clasista, de derecha facha, que –aprovechando los continuos dislates y los modos poco conciliadores en el culto a la personalidad del ejecutivo- se ha subido a la escena pública para anunciar su intención expresa de derrocar al titular del ejecutivo “antes del 1 de diciembre de este 2020”. Este movimiento se ha autonombrado como Frente Nacional Anti AMLO (FRENAA), y desde principios de año ha comenzado la difusión de sus intenciones, para llegar a mayo con una cabeza visible en su dirección: el empresario Pedro Luis Martín Bringas, accionista de Grupo Soriana, es el rostro de este frente golpista.
El grupo empresarial Soriana ya se deslindó de este personaje, no obstante, vale la pena repasar quién es y qué apoya, para tener un panorama completo del escenario. FRENAA se conforma por una veintena de colectivos de diferentes sectores del país, y se expandió desde inicios de año a través de redes sociales y grupos de whatsapp. De acuerdo al portal Contra Réplica, el grupo está liderado por 67 personas del sector empresarial y de medios de comunicación, entre los que destacan Pedro Ferriz de Con, Gilberto Lozano de FEMSA, Rafael Loret de Mola, Juan Bosco Abascal, y el propio Pedro Luis Martín Bringas.
En este colectivo de señoros whitexicans se concentra lo más rancio de la visión política nacional: capitalista; con sesgos de género, clase, y racialidad; de arraigo católico; aspiracional; y tradicionalista. Entre los disparates que pueden leerse en sus redes sociales, destaca la presunta alarma de que AMLO va a llevar a México al comunismo (risas grabadas), o han inoculado la idea de una separación del territorio nacional (similar al Brexit que separó al Reino Unido de la Unión Europea) a partir de la independización del hemisferio norte del país, en lo que han dado en llamar el “Nortexit” (más risas grabadas). Aunque sus postulados son irrisorios, puede ser que sus métodos no lo sean tanto. El país ya está demasiado polarizado (muchas veces por el discurso maniqueo del propio presidente) como para que la ciudadanía consienta la difusión de estos mensajes locuaces de la derecha facha y rancia.
La fecundidad de una panda de golpistas de la élite económica no es sana en ninguna democracia. Esto es una grave llamada de atención, no tanto al gobierno, sino a la inexistente e inarticulada oposición partidista, seria, comprometida, representativa, coherente, propositiva, que tanta falta le hace al país. Los yerros en el ejercicio del poder por parte del ejecutivo son naturales en cualquier gobierno republicano, y está en la construcción de una ciudadanía participativa el encauzar el ejercicio público en beneficio colectivo, sin caudillismos ni sediciones. Nuestra responsabilidad cívica tiene que ver con no tolerar las amenazas a la república, ni de parte de quienes detentan el poder mediante el totalitario culto a la personalidad; ni de parte de quienes, con su sedición locuaz, quieren derrocarlo.
Correo electrónico: alan.santacruz@gmail.com
Twitter: @_alan_santacruz
Facebook: /alan.santacruz.9




