Cuando los reflectores parecían apuntar exclusivamente hacia Shai Gilgeous-Alexander, una tormenta inesperada se desató en el Juego 5 de las Finales de la NBA: Jalen Williams firmó una actuación estelar de 40 puntos, liderando a los Thunder a una crucial victoria sobre los Pacers y colocándolos a un solo triunfo del anillo. Con ello, Williams ha escalado con fuerza en la carrera por el Jugador Más Valioso de las Finales, colocándose como el segundo favorito en las principales casas de apuestas.
Según los últimos datos de plataformas como DraftKings, Covers y OddsChecker, Williams ostenta ahora cuotas que oscilan entre +625 y +750 para alzarse con el trofeo Bill Russell. En términos simples, esto significa que una apuesta de $100 por su victoria como MVP podría devolver hasta $750 si logra consagrarse. Aunque aún se encuentra detrás de su compañero de equipo Gilgeous-Alexander —quien lidera con cuotas entre –550 y –600—, el ascenso de Williams es notable.
Su actuación en el Juego 5 no solo fue espectacular en números, sino también en impacto emocional: dominó en transición, fue implacable en el uno contra uno, y supo aparecer en momentos clave para sellar el triunfo. De hecho, algunos analistas ya lo catalogan como el verdadero “factor X” de esta serie final.
No obstante, el camino hacia el MVP no será fácil. Para desbancar a Shai, Williams necesitaría otra actuación destacada en el posible Juego 6, idealmente con un cierre heroico que deje una impresión imborrable en votantes y fanáticos. Y es que, como bien señala la historia, los equipos que ganan el Juego 5 cuando la serie va 2-2, terminan coronándose campeones en el 74 % de los casos.
En comparación, otros candidatos como Pascal Siakam o Tyrese Haliburton figuran muy por detrás, con cuotas que van desde +1200 hasta +2500.
Con el título al alcance y la narrativa de “sorpresa MVP” en el aire, Jalen Williams no solo lucha por su primer anillo de campeón: también podría consagrarse como uno de los MVP más inesperados y electrizantes de los últimos tiempos.
