Tlaxcala se suma a las entidades del país donde el aborto ha sido despenalizado, luego de que la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) declarara inválidas diversas disposiciones de la Ley de Salud y del Código Penal local. Antes de este fallo, la legislación tlaxcalteca castigaba a mujeres y personas gestantes víctimas de violencia sexual que interrumpían su embarazo sin una autorización previa del Ministerio Público.
En un proyecto presentado por la ministra Yasmín Esquivel, el Pleno de la SCJN determinó que estas normas imponían “barreras indebidas” a las víctimas de violencia familiar o sexual, resolviendo así la Acción de Inconstitucionalidad 89/2024. La Corte estableció que la atención médica no puede condicionarse al inicio de una investigación ministerial o a un proceso jurisdiccional para acceder a la interrupción del embarazo.
Con el voto favorable del Pleno el 2 de diciembre, Tlaxcala pasa a formar parte de una amplia lista de estados donde el aborto ya está despenalizado: Aguascalientes, Baja California, Baja California Sur, Campeche, Chiapas, Chihuahua, Ciudad de México, Coahuila, Colima, Estado de México, Guerrero, Hidalgo, Jalisco, Michoacán, Nayarit, Oaxaca, Puebla, Quintana Roo, San Luis Potosí, Sinaloa, Tabasco, Veracruz, Yucatán y Zacatecas. En todos ellos el límite general para la interrupción legal del embarazo es de 12 semanas, salvo Aguascalientes, que redujo el plazo a 6 semanas. En Tlaxcala aún falta que el Congreso local concrete las adecuaciones legales correspondientes.
A pesar de este avance, persisten estados que mantienen restricciones formales o prácticas que limitan el acceso a un aborto seguro y legal, lo que continúa generando desigualdad en el ejercicio de los derechos reproductivos en el país. Entre las entidades que aún presentan estas barreras se encuentran Durango, Guanajuato, Morelos, Nuevo León, Querétaro, Sonora y Tamaulipas.




