El día de hoy ya se tienen los resultados definitivos de las elecciones. Lo que viene serán los juicios e inconformidades de los candidatos y partidos que consideran que el resultado no fue el justo o legal, pero los que ya están con su constancia en la mano tendrán que prepararse para la responsabilidad que fueron elegidos.
Viendo esto creo que lo principal será que se informen qué será lo que van a recibir y sobre todo la agenda de prioridades en cada caso. Los que fueron elegidos para una diputación federal tendrán que informarse cómo se va a manejar el presupuesto cero, que el ejecutivo ya anunció que enviará a la Cámara de Diputados, y qué futuro le espera a la nueva Ley de Aguas, llamada Korenfeld, por el exdirector de Conagua, que dicen fue quién la elaboró; qué tiempo se van a llevar ambas cámaras para discutir y aprobar las leyes secundarias del sistema anticorrupción. Los 300 diputados elegidos por mayoría relativa y los 200 de dedazo, o sea por representación proporcional, tienen todos y cada uno de ellos la misma responsabilidad en todos los asuntos pendientes.
A nivel nacional se eligieron 9 gobernadores, y en dos estados el resultado fue de pronóstico reservado: Colima y San Luis Potosí. Ahora deberán ver cómo enfrentarán sus deudas públicas y cómo pagarle a los proveedores, que ya se encuentran desesperados; y qué van a hacer con los cuerpos de policía que están bajo su responsabilidad, pues ningún estado ha cumplido con la Ley de Seguridad Pública Nacional de certificar, depurar y profesionalizar a todos los elementos de esas corporaciones, enfrentar a la delincuencia en todas sus modalidades para regresarle a sus ciudadanos la paz y la tranquilidad. Tendrán que ir acondicionando sus presupuestos a las nuevas medidas de recortes presupuestales que tendrán forzosamente que adaptarse a la nueva realidad de nuestro país, pues no es posible que sigamos permitiendo que los tres niveles de gobierno: municipal, estatal y federal, continúen con el endeudamiento que ya se encuentra en niveles muy peligrosos para la estabilidad económica de nuestro país; y ahí entran con su responsabilidad los 871 alcaldes electos y los 323 diputados locales de mayoría relativa, y 211 de representación proporcional, para que en sus Congresos locales analicen la situación económica de sus entidades.
Por ejemplo, el alcalde electo de Guadalajara, Enrique Alfaro Martínez -que de paso comento ha sido toda una revelación, pues encabezando a un grupo de ciudadanos como candidatos a sus municipios ganaron también Zapopan, Tlaquepaque y Tlajomulco de Zúñiga, o sea la zona conurbada de la capital Tapatía-, se va a encontrar con la sorpresa de que su municipio es el más endeudada del país, pues debe 2,512 millones de pesos. Hay que considerar que el segundo lugar nacional en deuda es Ecatepec de Morelos (Estado de México), debe 686 millones de pesos, muy por debajo de Guadalajara. Así que ahí tiene todo un reto para auditar en que se invirtió tanto dinero y cómo va a pagar intereses y capital, sobre todo por la inseguridad que se ha adueñado de la Perla Tapatía y los servicios públicos tan deteriorados. Recordemos que siempre fue una de las ciudades con mejor equipamiento urbano. Otro problema es que el crecimiento de esa deuda fue muy importante con la administración municipal del actual gobernador Aristóteles Sandoval Díaz.
Un caso muy interesante será el de Nuevo León, en donde el electorado decidió un cambio verdaderamente espectacular, eligieron a un candidato independiente, Jaime Rodríguez Calderón El Bronco, y ahora será importante su actuar como gobernador, pues los señalamientos contra el gobernador y su padre han sido bastante duros; se habla de una corrupción de mucho dinero. Asimismo habrá que ver que trato tendrá el estado por parte del Gobierno Federal al ser gobernado por un candidato independiente.
Con lo anterior ahora debemos ver cómo van a enfrentar lo que sigue. Si realmente fueron candidatos conscientes de los problemas que iban a enfrentar y si lo van a hacer bien.
