- No se lleva un registro de las personas homosexuales que han cometido suicidio
- Por discriminación, quienes pertenecen a esta comunidad sufren más riesgos
El programa Ámate con el que el Gobierno del Estado pretende reducir el índice de suicidios en la entidad estará incompleto hasta que este atienda a las personas de la comunidad LGBTTTI, según Marco Antonio García Robles, quien se pronunció en favor de que existan registros de los suicidios y asesinatos de las personas que pertenecen a este sector poblacional.
García Robles, presidente de la fundación VIHDHA de Aguascalientes aseguró que si el Gobierno del Estado quiere reducir los suicidios en la entidad, debe ser incluyente con sus programas con las personas que forman parte de la comunidad Lésbico, Gay, Bisexual, Transexual, Transgénero, Travesti e Intersexual (LGBTTTI), pues sufren más riesgos de cometer suicidio debido a la constante discriminación que viven en prácticamente todos los espacios de su entorno, desde lo familiar, hasta lo laboral y en las calles.
Apenas hace unos días, detalló, uno de los varios suicidios que se registraron fue cometido por una persona homosexual a pesar de que ni los medios de comunicación ni las autoridades lo hayan presentado de esa manera.
Esta persona, comentó, vivía una seria depresión derivada de la discriminación en su entorno en general según personas cercanas. Esta situación finalmente incidió en que tomara la decisión de quitarse la vida.
Apenas unas semanas atrás se hizo conocido también en caso de un joven que se suicidó y dejó una carta póstuma a su madre donde menciona que esta no aceptaba su orientación sexual. A decir de García Robles estos son sólo dos casos de los muchos que no quedan claros en los índices de suicidio.
Comentó que tanto la Fiscalía General del Estado como las autoridades encargadas de la salud mental de Aguascalientes cumplirán de manera incompleta su objetivo y tendrán una visión parcial sobre la problemática del suicidio si no integran y visibilizan los casos de las personas homosexuales.
El programa Ámate, recientemente lanzado por el Gobierno del Estado también debe integrar a las personas de la comunidad LGBTTTI o de lo contrario se está cerrando a tener más éxito: “Es necesario que amen a las lesbianas, a los gays, a los bisexuales, a los transexuales, a las personas intersexuales, claro que existen esas personas que están afectadas en lo emocional y no se están atendiendo”.
Además es de suma importancia que exista una estadística que lleve la cuenta de las personas de la comunidad LGBTTTI que se han suicidado para saber qué tanto realmente afecta esta problemática a este sector poblacional, “Lo que no se mide, no se puede comprobar, si sabemos que tan grande es el problema y se contemplan antecedentes como violencia intrafamiliar o discriminación es como se puede actuar”.
A pesar de que existen casos en los que el suicida decidió ocultar su preferencia sexual o identidad sexogenérica hasta el momento de quitarse la vida, García Robles aseguró que hay procedimientos forenses de carácter sicológico que pueden revelar la orientación sexual de un individuo: “Normalmente cuando se presenta un suicidio se cierra la carpeta pero si hay indicios de que hubo un homicidio se realiza una investigación”, pero es importante que en estos acontecimientos se haga una investigación que tome en cuenta la orientación sexual y la identidad de los fallecidos pues no existe ni un registro de crímenes de odio como tampoco lo hay para personas LGBTTTI suicidas.




