Hace aproximadamente dos meses, un joven de la carrera de ciencias ambientales de la UAA me cuestionó sobre los términos sostenibilidad y sustentabilidad, y cuál es el correcto o el más adecuado usar, y de verdad la pregunta me dejó pensativo, y de inmediato investigué primero en el Diccionario de la Real Academia, y me encontré con lo siguiente:
Según la Real Academia Española, “sostenibilidad” es la cualidad de “sostenible”. Si algo es sostenible significa que se puede sostener. Cuando lo utilizamos para calificar, por ejemplo, a la producción de energía o al desarrollo económico, estamos afirmando que ambos procesos se pueden o se deben sostener. Esto está presente con la tendencia de preocuparnos por los recursos naturales o el bienestar de las futuras generaciones. Producción de energía sostenible implica que se debe sostener por sí sola, es decir, que pueda mantenerse a través del tiempo, y lo mismo sería para el crecimiento y un mayor bienestar para la sociedad.
Por otro lado, “sustentabilidad” es la cualidad de “sustentable”. Si algo tiene esta cualidad, significa que se puede defender con razones o argumentos, o sea que se puede sustentar. Podemos defender que la tierra es redonda porque tenemos mucha evidencia para sustentarlo. Si queremos, en cambio, afirmar que se puede viajar en el tiempo… difícilmente lo podremos sustentar. Debemos también tener cuidado de traducciones inglés-español equivocadas: “sustentable” podría ser la traducción equivocada de “sustainable”, tal vez porque se leen y se pronuncian similarmente.
En 1987 la Comisión de las Naciones Unidas sobre el Medio Ambiente Mundial y el Desarrollo, que conocemos como Comisión Brundtland, que en ese tiempo fue presidida por la primera ministra noruega Gro Harlem Brundtland, se le encomendó la elaboración y publicación del célebre informe “Nuestro Futuro Común” (Our Common Future). En este informe aparece por primera vez la referencia sobre el concepto de desarrollo sostenible, a partir de entonces se utiliza como sinónimo de sostenibilidad, y que lo identifica con aquellos caminos de progreso social, económico, y ambiental que satisfacen las necesidades del presente, sin comprometer la satisfacción de las necesidades de las generaciones futuras.
Para abordar los problemas ambientales que hoy afectan nuestro entorno local, estatal, nacional y mundial, es conveniente interesarnos en conocer que la sostenibilidad es también el uso consciente, responsable y proactivo de métodos que no dañen a las personas, a los sistemas que sustentan la vida, y a los recursos naturales, en todo el planeta.
En la Cumbre para el Desarrollo Sostenible, que se llevó a cabo en septiembre de 2015, los Estados Miembros de la ONU, aprobaron la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible, que incluye un conjunto de 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) para poner fin a la pobreza, luchar contra la desigualdad y la injusticia que a continuación se enumeran:
- Fin de la Pobreza. Poner fin a la pobreza en todas sus formas en todo el mundo.
- Hambre Cero. Poner fin al hambre, lograr la seguridad alimentaria y la mejora de la nutrición y promover la agricultura sostenible.
- Salud y Bienestar. Garantizar una vida sana y promover el bienestar para todas y todos en todas las edades.
- Educación de Calidad. Garantizar una educación inclusiva, equitativa y de calidad y promover oportunidades de aprendizaje durante toda la vida para todas y todos.
- Igualdad de Género. Lograr la igualdad entre los géneros y empoderar a todas la mujeres y niñas.
- Agua Limpia y Saneamiento. Garantizar la disponibilidad de agua y su gestión sostenible y el saneamiento para todos.
- Energía Asequible y no contaminante. Garantizar el acceso a una energía, asequible, segura, sostenible y moderna para todos.
- Trabajo Decente y Crecimiento Económico. Promover el crecimiento económico sostenido, inclusivo y sostenible, el empleo pleno y productivo y el trabajo decente para todos.
- Industria, Innovación e Infraestructura. Construir infraestructura resiliente, promover la industrialización inclusiva y sostenible y fomentar la innovación.
- Reducción de las Desigualdades. Reducir la desigualdad en y entre los países.
- Ciudades y comunidades Sostenibles. Lograr que las ciudades y asentamientos humanos sean inclusivos, seguros, resilientes y sostenibles.
- Producción y Consumo Responsables. Garantizar modalidades de consumo y producción sostenibles.
- Acción por el Clima. Adoptar medidas urgentes para combatir el cambio climático y sus efectos.
- Vida Submarina. Conservar y utilizar en forma sostenible los océanos, los mares y los recursos marinos para el desarrollo sostenible.
- Vida de Ecosistemas Terrestres. Promover el uso sostenible de los ecosistemas terrestres, luchar contra la desertificación, detener e invertir la degradación de las tierras y frenar la pérdida de la diversidad biológica.
- Paz, Justicia e Instituciones Sólidas. Promover sociedades pacíficas e inclusivas para el desarrollo sostenible, facilitar el acceso a la justicia para todos y crear instituciones eficaces, responsables e inclusivas a todos los niveles.
- Alianza para lograr Los Objetivos. Fortalecer los medios de ejecución y revitalizar la Alianza Mundial para el rollo social.
Es así que el concepto sostenible ha tomado carta de naturalización y es el más conveniente y adecuado cuando se habla de temas ambientales y sus soluciones.
Cristóbal Humberto Tenorio Izazaga
Director de Conciencia Ecológica de Aguascalientes, A.C.
htenorioizazaga@yahoo.com.mx




