- Pese a incertidumbre electoral, personas físicas apostaron por invertir su dinero
- Inmediato al 1 de julio, las empresas recobraron la confianza y comenzaron a cerrar convenios
Pese la incertidumbre que al sector inmobiliario provocó el proceso electoral de este año, tuvo el mejor primer semestre en ventas de bienes-inmuebles de los últimos cinco, con un repunte por arriba del cinco por ciento en relación con las propiedades colocadas en el 2017; aunque dos días después de las elecciones regresó la confianza y las empresas comenzaron a concretar convenios.
Contrario a lo que ocurre en épocas que se consideran de crisis, cuando las personas físicas se abstienen de adquirir bienes-raíces al considerar que su dinero podría perder capacidad adquisitiva, la gente sacó su dinero y lo puso a trabajar, informó el presidente de la Asociación Mexicana de Profesionales Inmobiliarios (AMPI) en Aguascalientes, Mario Santamaría Orozco: “Por el otro lado, vemos que las personas morales o las empresas detuvieron su inversión, y hasta que sucedieron las elecciones se comenzó a mover nuevamente”, y señaló de “impresionante” que al miércoles inmediato al 1 de julio, y con base en los resultados, la confianza se abrió de inmediato, pues muchas empresas locales y regionales que detuvieron sus inversiones, trabajan ahora mismo con las notarías para cerrar operaciones pendientes que no se habían finiquitado por la incertidumbre electoral.
Dado lo anterior, el sector inmobiliario espera que este año continúe siendo benéfico para ellos, debido a estas empresas que ahora están cerrando convenios.
El presidente local de la AMPI expuso que, Aguascalientes mantiene un crecimiento constante, independientemente de los gobiernos, pues el sector inmobiliario representa una de las bases más importantes de la economía.
Expuso que en los último ocho años, el crecimiento de la entidad ha sido importante y eso detona de forma importante al sector inmobiliario, pues las empresas que buscan terrenos para naves industriales también buscan casas para sus empleados y locales para dar servicios; así es como se han generado zonas que estaban detenidas desde hace cuatro años, en el sur y el poniente de la ciudad, en donde ahora ya no existen casas disponibles.
