- La iniciativa del presupuesto estatal para el 2021 debería de ser pública desde que se llevó al Legislativo, sin embargo, el Congreso del Estado no la dio a conocer porque no había sido aprobada, señalan asociaciones civiles
- En Aguascalientes fue difícil conseguir el proyecto de presupuesto para el 2021, falta mejorar transparencia proactiva
Este 2020, asociaciones civiles de Aguascalientes se unieron a la iniciativa #NuestrosPresupuestos que se realiza a la vez en Jalisco, Michoacán, Oaxaca, y Quintana Roo, con el objetivo de analizar los presupuestos estatales para socializarlos, discutirlos y, con ello, poder ver cuáles son las prioridades que los gobiernos tienen en la sociedad que están representando. Sin embargo, cuando se quiso cristalizar el análisis al presupuesto aprobado ya este 17 de diciembre en el estado, las organizaciones se encontraron con la barrera de no poder conseguir el documento fácilmente.
El movimiento de #NuestrosPresupuestosAgs está integrado localmente por asociaciones como Aguas con la bici, Aguas con las chicas, Colegio de Economistas, Consejo Estatal de Personas con Discapacidad, Movimiento Ambiental, Salvemos la Pona, entre otras, mismas que estaban interesadas en saber si los temas de perspectiva de género, inclusión de personas con discapacidad y movilidad estaban siendo priorizados desde las finanzas estatales.
Guillermo Jiménez, quien es parte de esta iniciativa en Aguascalientes, comentó que él fue uno de los encargados de conseguir los documentos de los presupuestos, siendo el de Aguascalientes el más difícil de obtener de todos: “En cada estado hemos tenido problemas distintos y pues creo que el caso de Aguascalientes fue el más complicado” dada su falta de transparencia.
El activista explicó que el artículo 46 de la Constitución Política del Estado establece que el Ejecutivo tiene hasta el 31 de octubre para presentar al Legislativo la iniciativa de presupuesto para el siguiente año, lo cual sí se hizo en tiempo y forma, pero sólo se le permitió al ente legislador tener acceso a dicho documento que, desde su perspectiva, debería de ser público desde el momento que llega al Congreso.
Ante esta situación, las organizaciones tuvieron que recurrir a hacer solicitudes de transparencia, tanto al poder Ejecutivo como al Legislativo, para poder ver, desde antes de que fuera aprobado, cómo venía la propuesta y, luego después de que el proyecto fuera aprobado, verificar qué cambios se hicieron para discutir sobre las prioridades que se dieron.
“Creo que cualquiera de las dos partes -Ejecutivo y Legislativo- lo pudo haber publicado”, opinó Guillermo Jiménez, antes de mencionar que obtener el proyecto de presupuesto de Aguascalientes fue difícil por las barreras de falta de transparencia que todavía existen.
El artículo 65 de la Ley General de Contabilidad Gubernamental establece que si bien el documento sí tiene que ser público, éste lo será sólo hasta después de que haya sido aprobado, lo cual no ayuda a una discusión previa de los proyectos que los ejecutivos emiten a los Congresos y eso hace que no se pueda generar debate público previo ni ver qué cambios se están haciendo.
La Secretaría de Finanzas no respondió la solicitud de información que se hizo al respecto, por otra parte, el Congreso de Aguascalientes replicó que no se podía publicar hasta que el documento fuera aprobado.
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