Al gobierno de la “transformación”, parece no decirle nada la realidad en la que se desenvuelve el país, es decir, parecería que la seguridad pública, la economía, la salud, la educación, la cultura, el deporte, los requerimientos de infraestructura, las relaciones internacionales, la misma política, no significan gran cosa para la famosa Cuarta Transformación. Los atisbos que comparte el gobierno en materia de lo que a su entender es la vida nacional, cada uno de los temas relacionados, sólo ocupan un breve espacio en sus prioridades o intereses de atención, quizá sólo aquellas tareas relacionadas con la popularidad del presidente y la aprobación de su desempeño sean debidamente atendidas por el aparato oficial del Estado.
Apenas hace una semana se dio a conocer la fatídica noticia del incendio del ¿albergue? para migrantes de Ciudad Juárez, Chihuahua, con el saldo de 39 migrantes fallecidos y casi una treintena de heridos, muchos de ellos graves. La responsabilidad de la seguridad de dicho albergue es del Estado mexicano, específicamente de la Secretaría de Gobernación a través del Instituto Nacional de Migración (INM) cuyo titular, Francisco Garduño Yañez, ha sido debidamente protegido (¿escondido?) por el gobierno de la 4t, al extremo de que el presidente López Obrador, en su mañanera, achacó la responsabilidad del siniestro a los propios migrantes. Así se las gasta el gobierno. Nunca asume su responsabilidad, y el “prestigio” del presidente, no se compromete bajo ninguna circunstancia. Por su parte, Rosa Icela Rodríguez Velázquez, secretaria de Seguridad y Protección Ciudadana, así de pomposo su cargo, afirmó que ya se tenían identificados, y quizá detenidos, a los responsables materiales de la desgracia de los migrantes. Custodios y directivos de la empresa de seguridad privada contratada para el resguardo del centro de migrantes. Pero de los responsables, nada, ni del titular del INM, ni las corcholatas, ni César Augusto López ni Marcelo Ebrad, secretarios de Gobernación y Relaciones Exteriores, respectivamente. Impunidad pues.
A pesar de los 39 fallecidos de los migrantes afectados, resulta, en la visión y el discurso lopezobradorista, que el agraviado resulta ser el propio presidente, que el incendio sucedió para afectar a su gobierno, a su persona. Así de mal está Andrés Manuel. Retuercen los hechos y la realidad para su beneficio político. Triste para los migrantes, triste para México.
En otro tema, la Secretaría de Hacienda y Crédito Público reconoció en la semana, muy a su pesar, que la deuda pública del país se incrementó en un 47%, ello debido al aumento en la tasa de interés que aprobó el BM el jueves 30 al establecerla en 11.25%, poniendo los números en los dos primeros meses del año en la cifra de 150 mil 95.5 millones de pesos, siendo esta cantidad superior a la contemplada por el gobierno (de 141 mil 544.8 millones de pesos) en 8 mil 551 millones, según el propio Informe de Finanzas y Deuda Pública de la SHCP correspondiente al mes de febrero. Así, con la nueva tasa, el costo financiero del sector público pasó de 94 mil 499.5 millones de pesos a diciembre del 2022 a finales de febrero. (Marco A. Mares, El Economista, 31/03/23)
Sin duda, este asunto de la deuda pública será un tema que la 4t se esmerará en mantener en un perfil muy bajo en la discusión pública nacional, ya que va en contrasentido a la narrativa lopezobradorista de no más deuda, y a pesar del “superpeso”. Quizá encuentre refugio en la marginal baja en la inflación, aunque está prendido esto con alfileres debido a la inestabilidad del sector financiero internacional, particularmente de los EU.
La economía nacional está intrínsecamente atada a la economía global, y su evolución depende de la intensidad y consistencia de su relación. Cuidar y respetar los términos el T-MEC es fundamental para salir adelante en el corto plazo de manera exitosa, promover la inversión pública directa con garantías para la inversión será clave para fortalecer el empleo y la competitividad en el mundo globalizado. No arriesgar con posibles paneles de solución de controversias en temas como las energías alternas, el maíz transgénico o las relaciones laborales. Los socios comerciales están muy atentos al desarrollo de estos temas.
Parecería ser que hoy, al país entero lo ha absorbido el tema electoral, con las designaciones de los cuatro consejeros del INE, entre ellos el de la consejera presidenta Guadalupe Taddei Zavala, y el arranque de las campañas para gobernador en el Estado de México y Coahuila, y nada hay más importante para México, que el fin de la era de Lorenzo Córdova y Noé Murayama, las pesadillas del presidente y su 4t. Esperemos, para el bien del país que esta nueva era del INE, que se extenderá hasta el 2032, sea para bien y no represente una larga noche oscura para la democracia nacional.
A estas alturas del gobierno lopezobradorista, ya es difícil esperar la mejora en temas como la salud, la educación, la vivienda e infraestructura, la cultura, el deporte, la ciencia, a lo más que podemos aspirar es a que no empeore más. Que no se siga destruyendo más el sistema de salud pública; que la educación no demerite más sus estándares de calidad en la educación básica, al menos en las áreas de español y matemáticas, donde ocupa nuestro sistema educativo los últimos lugares en su evaluación. Qué la promoción de la vivienda y el desarrollo de la infraestructura nacional atienda las auténticas necesidades del país.
Estos temas serán relevantes en el transcurso de este 2023, que quede claro que para México, la popularidad y aprobación del presidente no son suficientes para resolver las necesidades inmediatas para el bienestar nacional. Atender las prioridades concretas y reales del país deberán ser atendidas por el gobierno de manera clara y responsable. Tal es la realidad que se está haciendo escuchar cada vez más fuerte al interior de Palacio Nacional. Sería muy lamentable que se ignorara el llamado del 2023.




