Cátedra
Si quieres tú
Martillea el corazón;
la mente abrupta
y las manos nerviosas se derraman.
Ayer no es como hoy;
ayer fue siempre
y ahora ya no es eso:
ahora es nunca.
Nunca.
Y tengo en mis recuerdos
las huellas de unas manos
y una boca.
Y tengo todavía
en mis tristes amores
las huellas de unos besos
y unas flores.
Marchitas ya las manos;
perdida la mirada
y el corazón inerme
por buscar la esperanza
no encontrada.
2
El tiempo se detiene;
se paraliza todo.
La distancia se esfuma
pues no tiene distancia
ni caricias, ni besos.
Pues no tiene cariño
ni fragancia.
Una nube se va
tirada por el viento,
y otra nube
tirada por el viento
llega y muere.
El árbol tiene hojas;
muchas hojas.
Pero son otras hojas:
las de ayer ya murieron
destrozadas, marchitas
y azotadas por nieves y por vientos.
Y las hojas de ayer fueron preciosas.
Muy preciosas…
Mañana habrá más hojas…
muchas hojas…
Por la unidad en la diversidad
Aguascalientes, México, América Latina




