- De los 11 indicadores evaluados por el SINDES, 5 presentan deficiencias
- Mejorar indicadores en eficacia de ingresos fiscales, distribución del gasto sujeto a licitación, invitación directa y adjudicación directa; así como en pagos de contribuyentes vía internet
A escasos días de que concluya la gestión de Lorena Martínez Rodríguez como alcaldesa del municipio de Aguascalientes para ceder el cargo a manos de Antonio Martín del Campo, vale la pena hacer referencia a los rubros municipales que cuentan con deficiencias en las que tendrá que poner atención quien asume el cargo.
De esta manera, el Sistema de Indicadores de Desempeño (SINDES), programa adscrito al International City Management Association (ICMA) en Latinoamérica, evalúa diversos indicadores de las gestiones municipales de 26 municipios en el país, entre ellos la capital de Aguascalientes.
En lo concerniente a la Hacienda Pública, fueron evaluados 11 indicadores, de los 15 que presenta el sistema, en los que la gestión de Martínez Rodríguez obtuvo una calificación de 63.63. Ello se explica por qué de los once evaluados, en cinco fueron detectadas con deficiencias.
Así, en lo que respecta a la autonomía financiera, el municipio capital pasó de tener en 2012 un promedio de 28.46, a 29.48 en 2013, por encima de la media estimada de 26.78 respecto otras ciudades.
Por su parte, en referencia a la eficacia del cobro del Impuesto Predial, vio una reducción de 2011 a 2012, de 80.13 a 78.95, lo cual no significó problema alguno ya que la media se ubicaba en 54.54 por ciento.
En el caso de la liquidez, el SINDES observó que del segundo semestre de 2012 con tres mil 15.33 por ciento se redujo considerablemente a 403.81, lo cual significó que apenas pudiera mantenerse sobre la media.
Por otro lado en el indicador de Ingresos Propios vs. Base tributaria; hasta 2011 era de 107.12 por ciento, por encima de la media de 88.89.
Además se mostró que en lo concerniente a la deuda respecto los ingresos propios, se dio una reducción de 0.78 a 0.63 entre los años de 2011 y 2012, cuestión que lo mantuvo por debajo de la media de 1.55, fenómeno que dio cuenta de un reducido endeudamiento.
En el rango de la autonomía financiera para cubrir el gasto corriente, destaca que de tener en 2011 una autonomía del 89.38 por ciento, paso en 2012 a reducirse en 86.19, sin que dicha reducción significara un problema, ya que la media se encontraba en 53.55 por ciento.
En contraste se encuentran aquellos indicadores donde fueron visualizadas importantes deficiencias. Tal es el caso del rubro correspondiente a la eficacia en los ingresos fiscales, donde pasó de tener un rango de 1.03 a 0.95, fenómeno que le significó encontrarse por debajo de la media de 1.19.
Además se detectan puntos que deben ser tomados en cuenta en lo correspondiente a la forma en la que ejerce el gasto público, ya que en el caso del sujeto a licitación pasó de tener un promedio de 34.29 por ciento en la segunda mitad de 2012, a 25.61 en la primera mitad de 2013, mientras que la media se ubicaba en 40.46 por ciento.
De la misma manera se encuentra el gasto sujeto a invitación directa, donde se registró que en la segunda mitad de 2012 se encontraba en 26.08 por ciento, que pasaría a partir de la primera mitad de 2013 a 5.53, situándolo por debajo de la media de 18.33 por ciento.
Finalmente, llama la atención el correspondiente a la adjudicación directa, donde el municipio de Aguascalientes pasó de erogar 22.68 por ciento en 2012 a un considerable aumento del 65.20 para 2013, muy por arriba de la media que se encontraba en 38.82 por ciento.
Otro de los aspectos en los que valdría la vena poner atención es el que hace mención a los pagos de los contribuyentes vía internet respecto los ingresos propios, donde la gestión de Lorena Martínez pasó en 2011 de 3.38 por ciento a 0.52 por ciento en 2012, una importante diferencia que fue suficiente para situarlo por debajo de la media de 1.10 por ciento. Cuestión que si bien no genera un impacto directo, como los mencionados, es tomado en cuenta por el SINDES para observar su capacidad recaudatoria.
Foto: Roberto Guerra
