Al final, luego de esta gran travesía es lo único que queda por decir: ¡Gracias!
Fueron 45 días de intensa campaña, de sol y de sombra, de mucho polvo, de cansancio en los pies, en la espalda, en el cuerpo entero. Horas que compartimos con los amigos y con quienes día tras día se fueron sumando a este proyecto que presentamos de corazón, en el que buscamos convencer a las personas que estaban cansadas de lo mismo de siempre, de que había una verdadera nueva opción. Una nueva oportunidad.
Hubo personas que al principio ni las puertas nos abrían, cuando pasaron los días ellos mismos fueron quienes nos buscaron para pedirnos información, otros que con la segunda vuelta nos recibieron de buena manera en sus hogares. La gente buena se fue convenciendo del proyecto, conocía las propuestas, las apoyaba e incluso aportaba nuevas ideas para seguir adelante. A ellos, ¡Gracias!
Desafortunadamente las campañas se mancharon. La mala intención de un grupo terminó por desprestigiar el proceso que llevaba tintes de propuestas y contraste de ideas. Al verse superados por ello, volvieron a lo mismo, a enturbiar el agua, a enlodar el ambiente y por consiguiente a generar el mismo hartazgo entre los ciudadanos que volvieron a repetir las frases tan conocidas como: “son los mismos de siempre”, “la misma porquería”, “no hay propuestas, sólo ataques”…
Y eso fue lo que pasó y marcó la campaña al final, aunado a la memoria cortoplacista de muchos de los electores, ocurrió que todo lo bueno construido se fue a la basura por dimes y diretes de los mismos bandos de siempre que se disputan el simple poder por el poder. Se olvidaron de las personas, dejaron de lado su pacto de “no agresión “ y de “civilidad”, tundiéndose hasta con “la cubeta” en una lucha sin sentido con acusaciones graves que ahora tendrán que comprobar o retractarse de ellas.
Adiós a las propuestas, hasta nunca a las campañas limpias. Reconozco que fue iluso creer que ellos, los amos del juego sucio, accederían por primera vez a competir en el marco de la legalidad. Debimos estar más preparados para lograr contrarrestar la basura que lanzaron al aire y que pudo al final detener el impulso que nuestro movimiento llevaba.
Al final, por nuestra parte uno de los objetivos, no se consiguió, nos quedamos cortos y deberemos volverlo a intentar después, ahora con conocimiento de causa y con nuevas estrategias que nos ayuden a mejorar e incluso que puedan ayudarnos a garantizar éxito en las contiendas venideras.
A quienes a pesar de las circunstancias del clima salieron a votar: ¡Gracias! A quienes tuvieron que caminar un par de kilómetros para encontrar su casilla y votar por nuestra imagen, por nuestro nombre y nuestro movimiento: ¡Muchas gracias! Es por ustedes que nos esforzamos día a día y por quienes seguiremos luchando para obtener más y poder así devolverles lo mucho que nos dan. Saben perfectamente que nunca han estado solos y pueden confiar en que así seguirá siendo.
Por ahora no resta más que replegarnos y volver a las calles, ahora para agradecer a quienes confiaron en nosotros. Prometimos volver fuera cual fuera el resultado de las elecciones y es tiempo de cumplir con nuestra palabra, así marcamos la diferencia con todos aquéllos que el domingo obtuvieron la mayoría de votos y estoy seguro que pocas veces o nunca más volverán a verlos en las calles de los distritos que apenas recorrieron y que ahora representarán desde el Congreso.
Las elecciones van y vienen, pero los amigos se quedan, las voluntades que logramos conjuntar, las sonrisas ganadas y los saludos de buena gana se quedarán con nosotros hasta el momento de volver a salir y dar pelea de nuevo por una nueva oportunidad de representar verdaderamente con ciudadanos a los ciudadanos.
Las personas deben saber que este movimiento no para aquí, que seguiremos esforzándonos en crecer, que cumpliremos en la medida de nuestras posibilidades las promesas que hicimos, que las manos que estrechamos volverán a apretarse fuerte para llevarle un poco, aunque sea un poco de lo mucho que todos ustedes nos han dado.
A quienes desde el principio creyeron en nosotros y a quienes hasta el final nos dieron su voto de confianza, les digo de corazón: ¡Muchas Gracias! Y desde ahora me comprometo, junto con este gran movimiento a mejorar en todo lo que debamos hacerlo para que en las oportunidades venideras podamos convertirnos en una opción real de gobierno y una alternativa de voto para todas las personas.
A los que se han manifestado cansados de los mismos de siempre y salieron a votar por una propuesta diferente, los felicito, a quienes se quedaron en casa y dejaron que los demás eligieran por ustedes, los invito a reflexionar y en base a los resultados obtenidos, hacerles hincapié en la importancia de su voto.
Vendrán más campañas y nuevas elecciones y entonces estaremos como en la que recién terminó, de nueva cuenta en las calles sembrando ideas para cosechar voluntades que nos hagan tener la oportunidad de ofrecer algo mejor a nuestro Aguascalientes que tanto amamos. Porque hoy como en cualquier oportunidad: hacer el bien siempre tiene su recompensa.
