El futbol americano en México es un deporte con mucha tradición y sobre todo que une a las familias. Como lo narra Alejandro Morales Troncoso en su libro 100 del Futbol americano en México, este deporte del balón mano comenzó a jugarse en México por ahí del 1890 cuando se dieron los primeros juegos en Veracruz.
Un siglo después el futbol americano en México es un deporte bien establecido con diferentes ligas, desde la categoría tiny toot (los más pequeñitos de entre cuatro y 5 años de edad) la infantil, juvenil, colegial y profesional varonil y femenil.
No importa la edad o el género el futbol americano en México es un deporte incluyente y del que se derivan barios grupos de animación o porras, como tradicionalmente se conocen.
Uno de los grupos más tradicionales es La Yarda 50 AC, quienes están conformados desde 1964 y dedican su tiempo, además de apoyar a los equipos de futbol americano de la UNAM en cada uno de sus partidos, a realizar actividades para recaudar fondos a favor de los niños con cáncer.
Si usted a escuchado alguna vez un “Goya, Goya”, esas primeras palabras que resuenan en los estadios y le ponen la piel chinita por la efusividad y pasión con la que es expresada, entonces ya conoce a La Yarda 50 pues son ellos quienes interpretan a todo pulmón las porras para que su equipo sienta en apoyo y se llene de energía para ganar el encuentro.
Esas porras podemos escucharlas en la transmisión de los partidos en la televisión pero tengo que reconocer que no es lo mismo. En el estadio el “Goya” es majestuoso, ensordecedor, una experiencia que hay que vivir para poder contar y que sin duda no podemos perder.
Decíamos que La Yarda 50 es mucho más que un grupo de animación y es que realizan recolección de tapitas y tapatones pues los tratamientos de los niños con cáncer son muy costosos.
Es una actividad loable que realizan desde hace muchos años y con la satisfacción de saber que mucho de esos niños sea han recuperado gracias a su labor.
Platicamos con uno de los miembros de La Yarda 50, Arturo Valencia ya que llevó el altruismo del grupo de animación hasta El Salto, Jalisco para apoyar al comedor comunitario de Don Jesús Escareño.
El comedor comunitario existe para que personas vulnerables puedan tener acceso a una o dos comidas al día de lunes a viernes pero sobre todo, saludables.
El comedor apoya a personas vulnerables como adultos mayores, viudas, madres solteras y niños con capacidades diferentes desde hace ya algún años pero querían ir más allá y ofrecer algo más a la comunidad por lo que buscaron una opción que pudiera contribuir con el proyecto.
Como miembro de La Yarda 50 Arturo ha trabajado arduamente en los tapatones en favor de los niños con cáncer y también es maestro de teatro por lo que al llegar a comedor comunitario de El Salto de inmediato formó un grupo de teatro infantil para que los niños tengan un espacio donde recrearse y ocuparse. Como todos sabemos el arte es muy importante en el desarrollo intelectual de los niños así que con las puestas en escena de las obras los niños tienen la oportunidad de divertirse al tiempo que forman su yo artístico.
Pero no únicamente han realizado obras de teatro ya que han recolectado ropa, libros, medicamento para que las personas que visitan el comedor puedan tener artículos básicos para su vida cotidiana.
Junto al super héroe “El señor tapitas” se hicieron brigadas para recolectar tapitas en apoyo a los niños con cáncer que visitan el comedor comunitario.
Dicen por ahí que lo importante para las sociedades no es el darles todo sino el enseñarles cómo, cómo se resuelve un problema, se generan recursos, se toman decisiones y es justo lo que Arturo les mostró a los usuarios del comedor comunitario.
En México hacen falta muchos más grupos de animación como La Yarda 50, que trabajan por la comunidad fomentando el deporte en un ambiente sano y libre de violencia.
La Yarda 50 es una de los más antiguos grupos de animación, tiene 10 años como AC y muchos más de 50 años de vivir la pasión por el futbol americano en México.
Lo más loable es que como AC comparte su altruismo fuera del futbol americano y llevan su voluntariado más allá del campo para compartir su activismo con quien lo necesitan.
Que cada vez sea mayor la afición al futbol americano en México increíble, ya que el deporte puede vivirse desde diferentes posiciones, siendo jugador, porrista o aficionado en familia y mucho más ahora que la Liga de Futbol Americano (LFA) profesional estará mejorando su nivel.
México necesita más Arturos y más Yarda 50 para que mostrar a la sociedad que existen muchas formas de apoyar las causas por las que hay que luchar como lo es el cáncer infantil y los comedores comunitarios.
El ambiente familiar que se vive en los partidos de americano, la hermandad que los aficionados comparten trasciende las canchas y se convierten en grupos de animación que engrandecen a los equipos y que invita a quienes aún no eligen uno a formar parte de ellos.
Laus Deo
@paulanajber
