Esta colaboración nace del “reto” lanzado contra el PRI, por mi dilecto amigo el diputado local Alfredo Reyes Velázquez, que también fue ignorado por el partido tricolor en Aguascalientes, no como resultado de alguna táctica de combate partidista recomendada por Tzun Tzu, al “cuarto de guerra”, sino porque sus dirigentes siguen deshojando la margarita para ver si descubren algún método infalible que cancele, ¡de una vez por todas!, las legítimas aspiraciones de los militantes del PRI que aspiran a ser postulados a algún cargo de elección popular.
Les cuento que en el palacio legislativo me encontré al Mosco Reyes, quien dialogaba con el periodista Matías Lozano, y le confirmaba que en el PRI tienen pavor de enfrentarse a una Mega-Alianza Electoral del PAN con el Panal, PRD, PT, Movimiento Ciudadano: ellos saben –dijo con firmeza–, que perdieron Aguascalientes ¡yo los reto (sic), a que hagamos un comparativo!, pues de no haber sido por la Coalición con el Panal y el Partido Verde, el PRI no habría llegado al poder” (resic).
Ante tan sublimes afirmaciones me sacudí el escaso polvo que me queda de la disciplina institucional y dejé emerger el espíritu de mis antepasados revolucionarios. La verdad es que no me aguanté las ganas de responderle al diputado Reyes “el retador”, y demostrarle el porqué no todos los priístas le tienen pavor a una Mega-Alianza opositora integrada con los restos de un PAN des-ideologizado, y una “nueva izquierda” del PRD, y PT, que se olvidó de su compromiso con los obreros y come en la mesa la socialdemocracia burguesa protegida por el Partido Movimiento Ciudadano.
Acepto que estoy corriendo el riesgo político de quedarme fuera de las candidaturas en 2013, por ejercer mi derecho a la libre expresión de las ideas, y no haber recibido “línea”, ni del “Jefe”, ni de la “Jefa”, para batirme en duelo contra el “retador” Reyes, ante la huida de los guardianes del Palacio. Antes de morir, le doy las gracias a los guardianes, Lupe y Chema, que al rehuir al debate racional contra los próceres del PAN, me brindan un espacio en los diarios para expresar mi opinión y analizar los posibles escenarios del resultado de los comicios del 2013.
En primer lugar suscribo que derivado de un riguroso análisis histórico del voto en el municipio de Aguascalientes, se confirma una vez más, la indiscutible fuerza electoral que para el PRI representa la licenciada Lorena Martínez Rodríguez, actual Alcaldesa de la capital del Estado. En segundo término sostengo: el PRI podría ganar ampliamente los comicios municipales del domingo 7 de julio 2013, inclusive sin firmar una Coalición con el Panal y el PVEM. Pero hay una condición indispensable: debe postular mujeres o varones mayormente jóvenes, con identidad priísta y experiencia política que entusiasmen al electorado y cuenten con arraigo social, y un equipo electoral eficiente. El Índice de Reconocimiento del Nombre (IRN), debe tener porcentajes similares a los que la Alcaldesa registró en los años 2009 y 2010, y registrar cero negativos. Un candidato muy conocido con altos negativos sería el anuncio de una derrota inminente.
Sería un suicidio electoral para el PRI de Aguascalientes pasar por alto que en 2010 la candidata Lorena Martínez, alcanzó una marca histórica de 142 mil 348 sufragios, y el mayor porcentaje de sufragios a favor del PRI en su historia, 48.5 por ciento de la votación total. Pero la fuerza electoral de la Alcaldesa es más elocuente cuando incluimos los votos que en su favor sumaron los partidos Coaligados, el PVEM y Panal, y que incrementa la votación hasta los 160 mil 119 sufragios, que equivalen al 55.1 por ciento del total de votos depositados en las urnas.
Lo anterior nos confirma que aun y cuando todos los partidos opositores decidieran ir, en 2013 contra del PRI, difícilmente alcanzarían los votos absolutos que la candidatura de Lorena Martínez Rodríguez sumó en 2010. El retador Alfredo Reyes, podrá comprobar lo que las cifras indican: bis a bis, en la elección de la Alcaldesa en 2010, el PRI por sí sólo derrotó al PAN. El triunfo del tricolor fue contundente e inobjetable. Esto lo saben muy bien en el PAN de los Orozco, de los González, y de los Reyes Velázquez. Y justamente por esa razón buscan afanosamente la formación de un frente amplio de partidos que estén dispuestos a abandonar sus principios en pos del poder. Es el fin de las ideologías. Un fraude a sus militantes.
La recuperación electoral del PAN está demasiado lejos en el municipio de Aguascalientes. El último candidato del PAN fue el señor Fernando Herrera, (quien en los comicios federales de 2012 fue electo Senador de la República, pero dos años antes obtuvo tan sólo 99 mil 333 votos, el 34.2 por ciento del total de votos de aquella elección; esta cifra es muy similar a la que obtuvo en 1995 el Mosco Reyes, que sumó 92 mil 863 votos, es decir el 36 por ciento de la votación total. En pocas palabras, proporcionalmente Fernando Herrera ha sido menos competitivo que mi amigo el Mosco, y si en el PAN hubiera justicia para la militancia, el “retador” Reyes debería ser el candidato del PAN a la presidencia municipal en el 2013.
Diputado Reyes Velázquez, me doy cuenta que alguien le hizo mal sus cuentas. Con los datos que le envío a través de esta colaboración, usted podrá comprobar el resultado de los comicios municipales en Aguascalientes a lo largo de los años de la alternancia. Hagamos el comparativo que usted propone y saquemos conclusiones.
Espero que pronto nos reunamos en una mesa de diálogo político y revisemos sus datos, los comparemos y publiquemos las expectativas.
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