Durante las últimas semanas hemos estado presenciando, a través de los medios de comunicación, una serie de “protestas” y “bloqueos”, sobre todo en las ciudades de México, Guerrero, Oaxaca y Chiapas. Todo esto, nos dicen, a causa de la Reforma Educativa, la cual creo que ya está en la mesa de negociaciones, a punto de ser modificada; a pesar de eso, los bloqueos en las carreteras siguen adelante, y ahora a las vías del ferrocarril, pero el problema es que ya están incendiando vehículos e instalaciones gubernamentales, y saquean comercios, o bien los bloquean, con la finalidad de que no vendan y quiebren.
Creo que ya no son acciones de protesta, sino que son acciones muy bien planificadas, con la finalidad de destrozar la economía de esos estados y regiones, pues están muy bien calculadas para poder alterar el abasto de combustibles, el abasto de refacciones y accesorios de la industria automotriz, el abasto de consumibles de todo tipo para la población, y qué decir de la industria turística, la cual se encuentra colapsada, ante la poca demanda del turismo nacional que está evitando viajar a las entidades en problemas.
A raíz de los hechos de Nochixtlán, la ausencia de autoridad es manifiesta, al grado de que en Chiapas un grupo de indígenas que se sintió afectado por un bloqueo en la carretera, fueron directamente y lanzaron fuera los presuntos “profesores” que se encontraban acampando en la vía de comunicación.
Si se analiza en dónde se colocan los bloqueos y en qué partes realizan incendios, podemos decir que están perfectamente calculados, y rebasan completamente a la autoridad, y que siempre traen un grupo de choque embozado al frente para lograr con efectividad sus fechorías.
Me parece una utopía de la Secretaría de Gobernación el que estén discutiendo cuestiones educativas, pues ellos van por la desestabilización del gobierno establecido, así lo dicen en sus manifiestos, y en tener el control y las canonjías que les quitaron a través de las acciones que realizó el Gobierno Federal, y que presionaron a los gobiernos estatales para que también ellos dejaran de estar dándoles cantidades millonarias para que se mantuvieran en calma.
Creo que el resultado de las conversaciones, sea cual sea, no va a resolver de fondo la problemática, y sí está siendo un ejemplo a otros grupos para que se den cuenta que a través de la presión y la disolución social, se consiguen prebendas.
Aquí la pregunta es: ¿Y las víctimas? Todos aquellos que perdieron o están a punto de perder su patrimonio. ¿Quién los va a resarcir? Pues no solo están perdiendo lo que tienen sino que aparte están amenazados si protestan.
Todo esto es una situación muy grave y delicada, pues los fines que se persiguen creo no son ya educativos, pues están tratando de desestabilizar al país, y vaya que el hecho de que la autoridad no se aparezca les está dando ánimos de que lo están logrando, nada van a lograr con tener en la cárcel algunos de los dirigentes pues los jueces los liberarán y saldrán como mártires y héroes del movimiento y con más enjundia de lograr sus fines.
No hay duda, estamos ante grupos subversivos que buscan poner de rodillas a la autoridad y hacerse del control del país. Y hasta ahora lo van logrando.
