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Entre acusaciones de activismo electoral desmedido, hoy visita el estado Felipe Calderón. Llega en medio de un ambiente atípico. De un lado, el gobernador del Estado, Luis Armando Reynoso Femat, parece tener su mejor momento, en lo que a relaciones con la Federación se refiere, desde que el calderonismo manda en la Presidencia de la República.

Y es que LARF ha tenido en el 2009, un respaldo excepcional desde el centro; en el aspecto político-partidista, el gobernador pudo erigirse como el “gran votante” en la elección de los candidatos del PAN a las diputaciones federales. La alianza, cuya corona es la candidatura de Raúl Cuadra en el Tercer Distrito, se sellaría si se confirma, como está previsto, la candidatura de Lourdes Reynoso Femat a San Lázaro por la vía de la representación proporcional.

Pero la luna de miel no se acaba en el tema partidista. El reconocimiento nacional a la SEPLADE y al Programa de Vivienda que desarrolló el estado, otorgados en días pasados, mandan el mensaje claro que el matrimonio va en serio; al menos, de aquí al 6 de julio, pues muchos panistas aseguran que la actitud del CEN será “radicalmente diferente” en lo que al 2010 se refiere.

No obstante, lo más interesante de la visita de Calderón será seguir observando el despliegue del jefe del gobierno federal en sus giras por los estados, el cual ha desatado fuertes controversias en la opinión pública, que le reclama haber replicado el modus operandi de Fox, quien hace unas semanas, reconoció abiertamente “haberle encargado el changarro a alguien mientras se dedicaba a hacer campaña”.

La visita de Calderón llega cuestionada por los cuadros más destacados del firmamento político local opositor, encabezado por Lorena Martínez Rodríguez, Carlos Lozano de la Torre, Isidoro Armendáriz, Nora Ruvalcaba, Noé García Gómez y Armando López Campa, quienes prometen “marcaje personal” al titular del Ejecutivo.

Una polémica invade los terrenos literarios del altiplano hidrocálido. Un grupo de jóvenes, visiblemente representados por Adán Brand Galindo, José Ricardo Pérez Ávila, Aldo García Ávila y Jorge Terrones, se han propuesto desenterrar las publicaciones que el ICA ha tenido a bien realizar en los últimos años, y criticarla. Criticar, porque se necesita, agrega Pérez Ávila, quien sugiere:

No creo estarme poniendo mamón. De acuerdo, el sistema de publicación, la población de seres interesados en leer lo escrito aquí y en Estambul debe ser poca, pero debe existir ¿o no? No espero mil ensayos ni tesis. Me conformaría con alguna discusión publicada, me conformaría con alguna polémica arrastrada entre algún mal pintor y un buen pintor por alguna parte. Bien, al menos yo no he encontrado gran cosa ¿Por qué existe tan poca crítica?

Los muchachos literatos, que se han hecho denominar como los Praga Boys, han iniciado su misión retomando en su sentido más amplio una metáfora (la del Zombie del Altiplano) elaborada por uno de los opinadores de este diario, Edilberto Aldán, quien en octubre de 2007, durante la presentación de los Premios Universitarios de Literatura de aquél entonces, señaló:

“Hasta hace poco sostenía que la literatura aguascalentense, cualquier cosa que eso signifique pero que parte de la premisa de lo que se escribe desde Aguascalientes, era el Zombie del Altiplano, un muerto que caminaba lentamente en espera del audaz que le entregara su acta de defunción y por esa circunstancia, mero trámite burocrático, iba por el panorama literario nacional arrastrando la cobija de sus glorias pasadas”

Sus discusiones pueden ser leídas en el sitio web México Kafkiano (www.mexicokafkiano.com.mx). La discusión tiene valor y relevancia en sí misma; es creativa, original y mordaz; reúne todas las características deseables en la crítica. Pero lo mejor se avizora en el futuro: todos estos jóvenes son escritores en potencia; si quieren matar al Zombie, la crítica, en forma de reseña, no es suficiente; nada sería Octavio Paz, ni Gabriel Zaid, ni Cosío Villegas, si de ellos sólo tuviéramos reseñas. Los Praga Boys están llamados a “tirar a matar” al Zombie del Altiplano, y hacerlo con novelas, poesía y ensayos de calidad. La Jornada Aguascalientes los felicita, y promete estar al tanto del futuro de la discusión y de la(s) respuesta(s) de los Zombies del Altiplano hidrocálido; sería una enorme contradicción que este capítulo se convirtiera en la obra.

P.D. De qué sirve la transparencia cuando una cláusula le permite a todos los servidores públicos esconder lo que ellos quieran esconder.

Lo que en un principio pareció un experimento interesante, en el que nos enterábamos qué “grillos” no pagaban su predial, los sueldos con nombres y apellidos de funcionarios y las compras de las secretarías, más rápido que lo que lo platicamos quedó en el olvido.

Todavía no se entiende en qué se pone en riesgo el estado si se hace público el pliego petitorio de un sindicato que el sólo mencionarlo evoca oscuridad. O por ejemplo por qué se pone en riesgo conocer  exactamente en qué se han gastado los recursos de la deuda pública.

Entre acusaciones de activismo electoral desmedido, hoy visita el estado Felipe Calderón. Llega en medio de un ambiente atípico. De un lado, el gobernador del Estado, Luis Armando Reynoso Femat, parece tener su mejor momento, en lo que a relaciones con la Federación se refiere, desde que el calderonismo manda en la Presidencia de la República.

Y es que LARF ha tenido en el 2009, un respaldo excepcional desde el centro; en el aspecto político-partidista, el gobernador pudo erigirse como el “gran votante” en la elección de los candidatos del PAN a las diputaciones federales. La alianza, cuya corona es la candidatura de Raúl Cuadra en el Tercer Distrito, se sellaría si se confirma, como está previsto, la candidatura de Lourdes Reynoso Femat a San Lázaro por la vía de la representación proporcional.

Pero la luna de miel no se acaba en el tema partidista. El reconocimiento nacional a la SEPLADE y al Programa de Vivienda que desarrolló el estado, otorgados en días pasados, mandan el mensaje claro que el matrimonio va en serio; al menos, de aquí al 6 de julio, pues muchos panistas aseguran que la actitud del CEN será “radicalmente diferente” en lo que al 2010 se refiere.

No obstante, lo más interesante de la visita de Calderón será seguir observando el despliegue del jefe del gobierno federal en sus giras por los estados, el cual ha desatado fuertes controversias en la opinión pública, que le reclama haber replicado el modus operandi de Fox, quien hace unas semanas, reconoció abiertamente “haberle encargado el changarro a alguien mientras se dedicaba a hacer campaña”.

La visita de Calderón llega cuestionada por los cuadros más destacados del firmamento político local opositor, encabezado por Lorena Martínez Rodríguez, Carlos Lozano de la Torre, Isidoro Armendáriz, Nora Ruvalcaba, Noé García Gómez y Armando López Campa, quienes prometen “marcaje personal” al titular del Ejecutivo.

Una polémica invade los terrenos literarios del altiplano hidrocálido. Un grupo de jóvenes, visiblemente representados por Adán Brand Galindo, José Ricardo Pérez Ávila, Aldo García Ávila y Jorge Terrones, se han propuesto desenterrar las publicaciones que el ICA ha tenido a bien realizar en los últimos años, y criticarla. Criticar, porque se necesita, agrega Pérez Ávila, quien sugiere:

No creo estarme poniendo mamón. De acuerdo, el sistema de publicación, la población de seres interesados en leer lo escrito aquí y en Estambul debe ser poca, pero debe existir ¿o no? No espero mil ensayos ni tesis. Me conformaría con alguna discusión publicada, me conformaría con alguna polémica arrastrada entre algún mal pintor y un buen pintor por alguna parte. Bien, al menos yo no he encontrado gran cosa ¿Por qué existe tan poca crítica?

Los muchachos literatos, que se han hecho denominar como los Praga Boys, han iniciado su misión retomando en su sentido más amplio una metáfora (la del Zombie del Altiplano) elaborada por uno de los opinadores de este diario, Edilberto Aldán, quien en octubre de 2007, durante la presentación de los Premios Universitarios de Literatura de aquél entonces, señaló:

“Hasta hace poco sostenía que la literatura aguascalentense, cualquier cosa que eso signifique pero que parte de la premisa de lo que se escribe desde Aguascalientes, era el Zombie del Altiplano, un muerto que caminaba lentamente en espera del audaz que le entregara su acta de defunción y por esa circunstancia, mero trámite burocrático, iba por el panorama literario nacional arrastrando la cobija de sus glorias pasadas”

Sus discusiones pueden ser leídas en el sitio web México Kafkiano (www.mexicokafkiano.com.mx). La discusión tiene valor y relevancia en sí misma; es creativa, original y mordaz; reúne todas las características deseables en la crítica. Pero lo mejor se avizora en el futuro: todos estos jóvenes son escritores en potencia; si quieren matar al Zombie, la crítica, en forma de reseña, no es suficiente; nada sería Octavio Paz, ni Gabriel Zaid, ni Cosío Villegas, si de ellos sólo tuviéramos reseñas. Los Praga Boys están llamados a “tirar a matar” al Zombie del Altiplano, y hacerlo con novelas, poesía y ensayos de calidad. La Jornada Aguascalientes los felicita, y promete estar al tanto del futuro de la discusión y de la(s) respuesta(s) de los Zombies del Altiplano hidrocálido; sería una enorme contradicción que este capítulo se convirtiera en la obra.

P.D. De qué sirve la transparencia cuando una cláusula le permite a todos los servidores públicos esconder lo que ellos quieran esconder.

Lo que en un principio pareció un experimento interesante, en el que nos enterábamos qué “grillos” no pagaban su predial, los sueldos con nombres y apellidos de funcionarios y las compras de las secretarías, más rápido que lo que lo platicamos quedó en el olvido.

Todavía no se entiende en qué se pone en riesgo el estado si se hace público el pliego petitorio de un sindicato que el sólo mencionarlo evoca oscuridad. O por ejemplo por qué se pone en riesgo conocer  exactamente en qué se han gastado los recursos de la deuda pública.

Nadie en este país debe obediencia al gobierno usurpador, aun cuando éste utilice a las fuerzas armadas para alcanzar la legitimidad que el pueblo mexicano le negó en las urnas. Felipe Calderón Hinojosa llega a Aguascalientes a fortalecer su campaña mediática a favor de su partido, en momentos en que su amasiato con el PRI  ha sufrido de dolorosos desencuentros que han complicado las relaciones de su gobierno con el Poder Legislativo, donde los tricolores ya empezaron a refrescarle la memoria recordándole que, sin ellos, jamás hubiera asumido la presidencia espuria. En otras palabras, el PRI le ha echado en cara al presidente ilegítimo que gracias a ellos y sólo a ellos, él seguirá desempeñando el papel de usurpador más allá de su incapacidad como gobernante. Bajo este contexto, queda clara la incapacidad del usurpador al no poder someter a los tribunales civiles la actuación delictiva del Ejército Mexicano, transformado hoy en un vulgar traficante de miseria al servicio del crimen organizado. Quién puede negar que el desarrollo del narcotráfico en México y su preponderancia en la economía nacional sólo se explica con la complicidad y la protección que el Ejército Mexicano ha brindado a los principales cárteles de la droga y al control que las fuerzas armadas ejercen en las fronteras y en los litorales marítimos. Todos sabemos que el comercio de la droga a gran escala se opera con la venia del cerrado círculo de generales administradores de la justicia militar, que tienen bajo su control en todos los rincones del país a las autoridades civiles, estatales y municipales, que nada pueden hacer ante el autoritarismo castrense de los militares encargados de la seguridad pública, quienes, a pesar de sus fechorías, sólo se someten a la jurisdicción militar  y no a los juzgados civiles, cuando estos son acusados por violaciones a los derechos humanos  y delitos contra la población civil. El usurpador Felipe Calderón, comandante supremo de las fuerzas armadas de México, no tiene empacho en seguir ignorando la sistemática violación a los derechos humanos y la insultante impunidad que el Ejército Mexicano, bajo su mando, está cometiendo a lo largo y ancho del país, con el pretexto del combate al crimen organizado.

Asesinatos, ejecuciones sumarias, detenciones arbitrarias, torturas, asaltos domiciliarios, brutal ferocidad y privación ilegal de la libertad son sólo algunas de las violaciones y atropellos a las garantías individuales que los militares, con absoluta impunidad, cometen en nombre de la seguridad. Nadie olvida el asalto a las oficinas del Congreso del Estado y la violencia ejercida contra los trabajadores del Poder Legislativo, bajo el mando del gorila Rolando Eugenio Eddy, quien dirige la Secretaría de Seguridad Pública en el Estado, y quien se ha caracterizado por imponer el sello de la casa solapado por los altos mandos militares; quienes, a su vez, han hecho del “tapaos los unos a los otros” la principal  virtud del Ejército Mexicano.

Quién entonces deberá obediencia a un gobierno usurpador o a todos aquellos que asuman funciones o cargos públicos por la fuerza de las armas. Es ésta la razón por la que Felipe Calderón solapa a una de las instituciones que, por su naturaleza, nadie puede tocar ni con el pétalo de un discurso. La detención de soldados por su colaboración con narcotraficantes en Sinaloa y la sentencia a los generales Humberto Quiroz Hermosillo y Mario Arturo Acosta Chaparro, no deben quedar en el olvido. Es necesario reabrir el viejo debate sobre la participación de las fuerzas armadas en el combate al narcotráfico. El Ejército Mexicano, la institución mejor calificada por los mexicanos, gracias a la magia de la televisión, seguirá patrullando las calles y plazas de la República por así convenir a los intereses de la oligarquía, y poco importará si las fuerzas armadas pierden credibilidad ante la opinión pública, mientras el “pelelato” se mantenga gracias a los alfileres con los que el PRI sostiene la Presidencia, y el ejército la legitimidad nunca alcanzada por el presidente espurio.

Desde hace unos días, en el sitio www.mexicokafkiano.com, comenzamos una campaña de promoción a la lectura y la crítica de lo que Aguascalientes ha producido en el plano literario. Nuestras dos primeras lecturas nos arrojaron resultados desfavorables para los autores leídos. No se trata de una campaña de desprestigio: son los libros que hemos leído los que no tienen las condiciones para salir bien librados de un análisis profundo; se desmoronan solos. Con tristeza, en la revisión de otros autores y libros locales, nos damos cuenta que no podemos esperar más de la mayoría.  

Nos han preguntado que cuál es el sentido de la crítica que hemos comenzado. Son muchas cosas las que nos mueven y todas deberían ser evidentes: es evidente, por ejemplo, el rezago tanto de literatura como de buena crítica literaria que sufre nuestro estado; también que unos cuantos que, en su tiempo, fueron promesas (y en eso quedaron), se apropiaron durante un periodo considerable de los espacios de publicación del ICA (muchos de ellos siguen bebiendo directamente de la ubre del erario público), con propuestas más bien lamentables. Es evidente que no se leyeron entre ellos y que, si lo hicieron, fueron lo suficientemente ‘amables’ como para felicitarse, en lugar de decir, aprovechando la amistad existente, si la había, y si no con mayor razón, que a qué estaban jugando; que por qué desperdiciaban de esa manera recursos naturales y monetarios que pudieron aprovecharse en buenos proyectos; es evidente también que a estas personas nunca les importó trascender, ser leídas, comentadas… con publicar bastaba (hasta hace unos días contaban con la seguridad de que nadie los leería; la mediocridad estaba resguardada; podían pasearse con su libro o el de algún buen autor por el centro, sentarse en el Codo y hablar con propiedad y autosuficiencia); evidente también que las becas para autores con trayectoria, sobre todo, pero también para nuevos autores, no han funcionado como se esperaba, debido a la falta de compromiso y/o de preparación -de los autores y del ICA-.  Pequeñas muestras de lo que digo pueden apreciarse en los textos críticos de José Ricardo Pérez Ávila y Jorge Terrones. Por supuesto y como ya he dicho, no son los únicos ejemplos; por lo menos hay una decena más de libros de diferentes autores que pueden ser pasados, con la mano en la cintura y sin mucho esfuerzo, por las armas. También, hay que reconocerlo; por ahí se encuentran algunaspocas excepciones en cuanto a creación literaria que, de cualquier forma, tampoco han recibido su crítica. Como han demostrado mis compañeros, en ningún momento apuntamos la mirilla a personas físicas; sino a sus productos literarios. Que como personas hagan o deshagan; no nos importa en absoluto; pero como creadores y como críticos, si quieren serlo, están obligados a intentar, por lo menos, hacer un trabajo honesto y comprometido, y deben estar conscientes de que, al publicar, lo escrito se vuelve un producto de dominio público, por decirlo de alguna manera, y, por lo tanto, está disponible para su lectura y su crítica. No se sientan entonces ofendidos los autores de los textos criticados, que la cosa va sobre sus productos. Si la apuesta de estas personas era publicar por publicar, y no para ser leídas, les pedimos que por lo menos sus producciones no le quiten dinero al erario público.  

Hay que aceptar, sin embargo, que poco a poco se van dando los cambios. Una respuesta al embargo que vivía -en el plano literario- la entidad, fue la creación de Parteaguas; otra ha sido el eliminar el sistema de publicación de libros que perseguía el objetivo político de incrementar la estadística a como diera lugar, (“¿Ya viste cuántos libros se publican en Aguascalientes, anualmente?, seguro se trata de una ciudad cultísima; su gobierno está haciendo una apuesta importante a la educación y a la cultura, etc.”) y la apuesta a proyectos como el de Primera obra, en el que, por lo menos, existe un proceso de selección que cuela, o lo intenta, las buenas obras, y desecha las malas. Empero, no es suficiente. No podemos decir que ya cambiamos todo lo que se puede cambiar. 

Tenemos, por ejemplo, un Centro de Investigaciones y Estudios Literarios de Aguascalientes… Queremos que funcione. Yo no conozco ningún estudio serio que haya salido de este lugar. ¿Que no hacen investigaciones literarias; que se dedican a tallercitos para todo público? Pues entonces es una obligación moral cambiarle el nombre a dicho centro. “Centro de talleres lingüísticos y literarios para principiantes”. Ya con ese mote les podemos aplaudir lo hecho, porque entonces sí estarían cumpliendo a cabalidad con los objetivos que, por el mismo título del centro, se intuye que persiguen. 

Traer de vez en cuando a artistas invitados, por un par de días, no resuelve en absoluto el lamentable estado en el que se encuentra el plano literario local. Hace falta trabajar de verdad, con las nuevas generaciones, y si las que viven de sus “glorias” de antaño se sienten con las suficientes fuerzas, pueden entonces empezar a trabajar, en serio, para que exista una crítica y una producción de la que nos podamos enorgullecer a la vuelta de los años. 

En el estado hay gente preparada profesionalmente para iniciar una fuerte producción de crítica y análisis literario. Los invitamos a que se sumen a nuestro esfuerzo. La apuesta es que, en un mediano plazo, podamos empezar a competir con el trabajo de producción crítica -y literaria, de ser posible- que se da, por ejemplo, en el Distrito Federal, Puebla, Guadalajara y Xalapa, entre otras entidades; la apuesta es que las generaciones que vienen entiendan que no se trata de publicar tonterías en revistas, fanzines y publicaciones vetustas hechas por y para los cuates, o de ir a beber café al CIELA y leer cualquier tontería digna del olvido; sino de prepararse bien para poder hablar y escribir con argumentos de peso, y poder competir después con cualquier otro teórico, crítico o creador literario, en el plano nacional, por lo menos.

[email protected]

Desde hace unos días, en el sitio www.mexicokafkiano.com, comenzamos una campaña de promoción a la lectura y la crítica de lo que Aguascalientes ha producido en el plano literario. Nuestras dos primeras lecturas nos arrojaron resultados desfavorables para los autores leídos. No se trata de una campaña de desprestigio: son los libros que hemos leído los que no tienen las condiciones para salir bien librados de un análisis profundo; se desmoronan solos. Con tristeza, en la revisión de otros autores y libros locales, nos damos cuenta que no podemos esperar más de la mayoría.  

Nos han preguntado que cuál es el sentido de la crítica que hemos comenzado. Son muchas cosas las que nos mueven y todas deberían ser evidentes: es evidente, por ejemplo, el rezago tanto de literatura como de buena crítica literaria que sufre nuestro estado; también que unos cuantos que, en su tiempo, fueron promesas (y en eso quedaron), se apropiaron durante un periodo considerable de los espacios de publicación del ICA (muchos de ellos siguen bebiendo directamente de la ubre del erario público), con propuestas más bien lamentables. Es evidente que no se leyeron entre ellos y que, si lo hicieron, fueron lo suficientemente ‘amables’ como para felicitarse, en lugar de decir, aprovechando la amistad existente, si la había, y si no con mayor razón, que a qué estaban jugando; que por qué desperdiciaban de esa manera recursos naturales y monetarios que pudieron aprovecharse en buenos proyectos; es evidente también que a estas personas nunca les importó trascender, ser leídas, comentadas… con publicar bastaba (hasta hace unos días contaban con la seguridad de que nadie los leería; la mediocridad estaba resguardada; podían pasearse con su libro o el de algún buen autor por el centro, sentarse en el Codo y hablar con propiedad y autosuficiencia); evidente también que las becas para autores con trayectoria, sobre todo, pero también para nuevos autores, no han funcionado como se esperaba, debido a la falta de compromiso y/o de preparación -de los autores y del ICA-.  Pequeñas muestras de lo que digo pueden apreciarse en los textos críticos de José Ricardo Pérez Ávila y Jorge Terrones. Por supuesto y como ya he dicho, no son los únicos ejemplos; por lo menos hay una decena más de libros de diferentes autores que pueden ser pasados, con la mano en la cintura y sin mucho esfuerzo, por las armas. También, hay que reconocerlo; por ahí se encuentran algunaspocas excepciones en cuanto a creación literaria que, de cualquier forma, tampoco han recibido su crítica. Como han demostrado mis compañeros, en ningún momento apuntamos la mirilla a personas físicas; sino a sus productos literarios. Que como personas hagan o deshagan; no nos importa en absoluto; pero como creadores y como críticos, si quieren serlo, están obligados a intentar, por lo menos, hacer un trabajo honesto y comprometido, y deben estar conscientes de que, al publicar, lo escrito se vuelve un producto de dominio público, por decirlo de alguna manera, y, por lo tanto, está disponible para su lectura y su crítica. No se sientan entonces ofendidos los autores de los textos criticados, que la cosa va sobre sus productos. Si la apuesta de estas personas era publicar por publicar, y no para ser leídas, les pedimos que por lo menos sus producciones no le quiten dinero al erario público.  

Hay que aceptar, sin embargo, que poco a poco se van dando los cambios. Una respuesta al embargo que vivía -en el plano literario- la entidad, fue la creación de Parteaguas; otra ha sido el eliminar el sistema de publicación de libros que perseguía el objetivo político de incrementar la estadística a como diera lugar, (“¿Ya viste cuántos libros se publican en Aguascalientes, anualmente?, seguro se trata de una ciudad cultísima; su gobierno está haciendo una apuesta importante a la educación y a la cultura, etc.”) y la apuesta a proyectos como el de Primera obra, en el que, por lo menos, existe un proceso de selección que cuela, o lo intenta, las buenas obras, y desecha las malas. Empero, no es suficiente. No podemos decir que ya cambiamos todo lo que se puede cambiar. 

Tenemos, por ejemplo, un Centro de Investigaciones y Estudios Literarios de Aguascalientes… Queremos que funcione. Yo no conozco ningún estudio serio que haya salido de este lugar. ¿Que no hacen investigaciones literarias; que se dedican a tallercitos para todo público? Pues entonces es una obligación moral cambiarle el nombre a dicho centro. “Centro de talleres lingüísticos y literarios para principiantes”. Ya con ese mote les podemos aplaudir lo hecho, porque entonces sí estarían cumpliendo a cabalidad con los objetivos que, por el mismo título del centro, se intuye que persiguen. 

Traer de vez en cuando a artistas invitados, por un par de días, no resuelve en absoluto el lamentable estado en el que se encuentra el plano literario local. Hace falta trabajar de verdad, con las nuevas generaciones, y si las que viven de sus “glorias” de antaño se sienten con las suficientes fuerzas, pueden entonces empezar a trabajar, en serio, para que exista una crítica y una producción de la que nos podamos enorgullecer a la vuelta de los años. 

En el estado hay gente preparada profesionalmente para iniciar una fuerte producción de crítica y análisis literario. Los invitamos a que se sumen a nuestro esfuerzo. La apuesta es que, en un mediano plazo, podamos empezar a competir con el trabajo de producción crítica -y literaria, de ser posible- que se da, por ejemplo, en el Distrito Federal, Puebla, Guadalajara y Xalapa, entre otras entidades; la apuesta es que las generaciones que vienen entiendan que no se trata de publicar tonterías en revistas, fanzines y publicaciones vetustas hechas por y para los cuates, o de ir a beber café al CIELA y leer cualquier tontería digna del olvido; sino de prepararse bien para poder hablar y escribir con argumentos de peso, y poder competir después con cualquier otro teórico, crítico o creador literario, en el plano nacional, por lo menos.

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He dado inicio, llevando un avance significativo, a la lectura de las plataformas electorales de los ocho partidos políticos con registro nacional.  Estos documentos han sido los registrados ante el IFE y reflejan la dirección que seguirán (o deberían seguir) los candidatos de los diferentes partidos o coaliciones de partidos en competencia en el actual proceso electoral para elegir diputados federales, en el caso de Aguascalientes, donde no hay elecciones concurrentes.

Confieso que el ejercicio de lectura y análisis me ha requerido buenas dosis de paciencia Jobiana para evitar que se me perfore el hígado. Pero dicho ejercicio no es inútil. Reconfirmo por enésima ocasión que el registro ante la autoridad electoral de estos  documentos no es mas que un requisito sin sustancia.  De seguir la norma como está,  bastaría con una ratificación en cada proceso electoral,  cambiando fechas.  Así es. No hay cambios significativos a las plataformas registradas  hace tres, seis o nueve años.

Pequeñas y pocas  modificaciones perceptibles en el discurso escrito de un proceso a otro. Adecuaciones ligeras a condiciones políticas actuales y tibias atenciones a las verdaderas demandas de los ciudadanos que quieren representar en el congreso. Cierto es que vacían en los documentos algunas de las demandas recurrentes de la ciudadanía en lo general, pero son cautelosos para evitar el compromiso. Hay honrosas salvedades que, si se me permite,  comentaré en este mismo espacio en posterior entrega. 

Dado que aún no inicia el periodo formal de campañas, de acuerdo con la nueva ley electoral, no queda mas que interpretar los hechos que protagonizan los personajes políticos que  se disputan “la de ocho” con sus actos o declaraciones, pero que conllevan una carga electorera inocultable: acusaciones, denuncias, balconeos,  legitimaciones y deslegitimaciones, elogios y descalificaciones a gobiernos, capitalizaciones de errores del adversario y elogios excesivos a los aciertos de los funcionarios y gobernantes, entregas de apoyos, inauguraciones, banderazos, bailes con viejitos, despensas, permanencia en la primera, nascar, feria de San Marcos, etc., etc., etc.,

Todo, absolutamente todo, con un telón de fondo: las elecciones

 Pues con éste escenario de plano electorero, descubro en una revista de circulación nacional una entrevista que se le hace al senador Manlio Fabio Beltrones, coordinador de los senadores del PRI, en la que expresa su preocupación por ciertos aspectos que, a su vez, preocupan a la población. Caso para Ripley.  Se manifiesta el Senador partidario de reducir el numero de diputados y senadores, de implementar la revocación de mandato (eso si, a cambio de la reelección inmediata de representantes populares en congresos y presidentes municipales; cataflixia pues), del referendo, del plebiscito y de la iniciativa popular.  Además, abunda, de una disminución del subsidio a los partidos políticos.

Sí, leyó usted bien: Manlio Fabio Beltrones lo declaró.  Y no tardó mucho tiempo en encontrar réplicas de sus declaraciones.  En cascada, mas rápido que ahorita mismo, correligionarios suyos se dan a la tarea de manifestarse públicamente a favor de esas formas de participación ciudadana y si es posible, legitimados por organizaciones civiles quienes dejaron arrebatarse la bandera con la facilidad que le arrebatan a un niño su dulce.

Los políticos en el poder, real o compartido, se vuelven a poner la careta de demócratas, casualmente ahora.  Los recuerdo hace tres, seis, nueve…….y más años. No es casual que muchos de ellos son los mismos rostros  y los que surgen nuevos, con las mismas caretas.  Aquí no es como en las promociones comerciales donde aplican restricciones.  Aquí hay cinismo sin restricciones.

Es pertinente decir que quienes mas han cacareado la demanda de una reforma electoral , donde se contemple una ley de participación ciudadana, son los partidos que ahora están subidos al ring, enlodándose con acusaciones, apostándole a dos asuntos: abstención alta y olvido.  Un alto índice de abstención preserva sus posiciones y no les importa que colateralmente se beneficien a partidos sanguijuelas del erario; aun se apuesta por el supuesto voto duro que no es sino el beneficiario del régimen en turno; a más despensas, más votos.  Por otra parte, le apuestan al olvido, a la supuesta falta de memoria reciente y en algunos casos al  valemadrismo.

¡Infórmate y piensa!, reza uno de los promocionales del IFE. Bueno, pues para pensarlo, debo de informar que las propuestas de creación de una ley de participación ciudadana ”integral” que contempla la revocación de mandato, referéndum, plebiscito e iniciativa popular que tanto se han mediatizado últimamente, solo se enuncian parcialmente en las plataformas electorales del PRI y del PAN o de plano se excluyen. ¡No son parte de su agenda legislativa!, aunque se argumente que en la actual legislatura se encuentra en comisiones.

O sea que habrá que interpretar que cada vez que se les presente la oportunidad a los candidatos gritarán a los cuatro vientos que promoverán ante las instancias correspondientes de sus partidos para subir las iniciativas a comisiones y después al pleno, bla bla bla bla.

La opción que se consolida como la más importante es el despertar de la ciudadanía organizada. Lo demás vendrá en consecuencia. n

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http://detrasdelmostrador-ags.blogspot.com

No falta quien asegura que, si bien ya no es un “catarrito”, la crisis actual no tardará en ser remontada con las grandes dosis de de recursos que el gobierno mexicano inyectará a la economía. Una fácil solución a un supuestamente sencillo problema es medianamente aceptable al ciudadano común. Pero el simplismo de este burdo diagnóstico, y consecuentemente palurda receta, preocupa cuando personajes de la más elevada responsabilidad gubernamental se aferran a éstas ante el peso de las evidencias acusa que la catástrofe representa el fin del sistema. Aún más cuando algunos candidatos a la legislatura federal del partido actualmente en el poder descartan con cerril criterio al tachar cualquier iniciativa de recomposición desde las bases con el despectivo epíteto de “socialista”. Cuando incluso en los círculos de poder del sistema monetario mundial se interpreta la crisis ya como un fenómeno que hará cambiar el rumbo del planeta en materia económica, se evidencia la perdición ideológica y la falta de propuesta de los candidatos entre los que habrá que elegir a nuestros representantes.

Los medios masivos de comunicación, cuando se trata de explicar el origen de esta crisis, se limitan a informar que la fase crítica del desmoronamiento del sistema monetario mundial comenzó al estallar la llamada burbuja especulativa de los negocios inmobiliarios. Pero faltó decir que más allá de la morosidad generalizada de las hipotecas de mala calidad (subprime), todas las “burbujas” financieras se basan en un montaje especulativo que es inherente al sistema económico actual. Que éste necesita de flujos constantes de inversiones líquidas que terminan distanciando los valores reales de los bienes (productos, servicios, inmuebles, etc.), de los valores virtuales, esto es, los que asigna el mercado financiero ávido de ganancias que arrasan la capacidad de reproducción económica.

Respecto a la crisis actual, el profesor en Economía Solidaria y animador de diversas experiencias y redes de economía solidaria y comercio justo en Uruguay y América Latina Pablo Guerra asegura que está siendo insuficientemente explicada. Al ponerse énfasis en la crisis financiera, dice, se oculta la trascendencia de otras dos crisis tanto o más fundamentales: la crisis energética y la crisis alimentaria.

La primera de ellas es fundamentalmente estructural. No puede ser sostenible un modelo económico que busca permanentemente el crecimiento en base a un recurso energético que se agota y que genera importantes externalidades ecológicas. Que también ha sido fuente de especulación y de manipulación como arma política y militar. La crisis energética, por sí sola, pone a la humanidad en la disyuntiva de repensar su modelo de desarrollo. Es por lo tanto, expresión de una crisis civilizatoria antes que de una crisis económica.

Respecto a la crisis alimentaria, surgen importantes valoraciones que comúnmente no son parte de la lógica economicista, pero que, desde un punto de vista de fundamental sustentabilidad deberían considerarse. El hecho es que si el modelo económico no garantiza el derecho a la vida y a una mínima alimentación a su población, entonces ese modelo ya no sirve.

La crisis financiera, la crisis energética y la crisis alimentaria, o lo que es lo mismo, la crisis sistémica, nos invitan a reflexionar sobre el rol del mercado en la economía, aspecto central en lo que refiere a las causas profundas. El sistema de mercado, el capitalismo como lo conocemos, debe ser superado por un sistema económico con otros fundamentos. Y esto nada tiene que ver con la lucha ideológica del socialismo que tanto espanta a los obtusos políticos.

Se requieren en el Congreso personas que puedan crear nuevas instituciones y modificar el marco jurídico del país para dar paso a una nueva economía. Por desgracia, ante la pugna partidista por el poder, con miras hacia la elección del próximo 5 de julio, las componendas y negociaciones “en lo oscurito” han llevado a peones o alfiles de recambio a ser candidatos sin las capacidades que ahora se necesitan. Por ello, la clase político-partidista va a ser incapaz de hacerlo.

Miguel Concha, en su opinión del pasado fin de semana en “La Jornada” cita cuatro desafíos de la sociedad civil para impulsar el proceso de transformación democrática en México. De éstos, el que parece fundamental, es el de dar cauce a actores políticos emanados de la sociedad civil con una nueva propuesta de Estado.

En lo económico, el desafío cobra un particular sentido toda vez que para avanzar en el camino por el cual se debe transitar, es necesario renovar las organizaciones campesinas y sindicales, sobre las cuales pesa un enorme fardo corporativista. Y a la vez, enfrentar los nichos de poder fáctico que a través del dinero defiende las visiones individualistas y liberales de la economía que son precisamente las que hay que superar.

Las soluciones vendrán a través de decisiones técnicas, que se combinen con un cambio que sitúe al comportamiento económico en el contexto de una ética del desarrollo humano, no sólo reivindicando sino fundamentalmente  mostrando desde sus prácticas concretas. 

autogestão, equidade de gênero, respeito às relações trabalhistas e agregação justa de valor, entre outros; finalizando-se com falas sobre os limites e as dificuldades da comercialização solidária que já acontece no Brasil.

La conocí una tarde de intenso e inclemente sol del mes de abril de 1990 en el umbral de las actividades sanmarqueñas. En medio de la formalidad y solemnidad del evento, me llamaron sobremanera la atención  su modestia y su sencillez marginal, su etérea desenvoltura, su manera de estar ahí sin querer estar, ajena e inexistente para las cámaras y los reflectores, no obstante que ella era de uno de los personajes catalogados como invitados especiales. Llegué, la vi (su cabellera blanca) y me rendí. Pensé en mi madre y pensé en el complejo de Edipo, pensé en una madre de familia, amorosa, hogareña y despistada. Dije para mis adentros: ¡Al diablo con la solemnidad! Me acerqué a ella y comenzamos a platicar. Se sumó al diálogo amistoso otro contertulio circunstancial, el pintor Julio Gaona. Al rato, tres hidrocálidos desconocidos entre sí, un novato promotor de cultura, una poeta en toda la extensión de la palabra y un artista plástico (en ese entonces “hijo pródigo”) chocaban sus cristales y brindaban con vino blanco por… su cumpleaños, el de ella, el de él y el mío. Bromeábamos, nos imaginábamos que nunca antes en nuestro cumpleaños, jamás, habíamos tenido tanta celebridad festejando nuestro natalicio: el gobernador, el director de cultura del estado, las autoridades de Conaculta, artistas, escritores y creadores locales, amigos, colados, guaruras, empleados de la institución, etc., brindando por la inauguración de la librería, y mientras tanto nosotros creyendo lúdicamente que era por nuestro natalicio. La amistad nace por y tiene motivos y razones que la razón no entiende. 

Al año siguiente, conscientes de la injusticia cultural cometida contra una de las  mejores mujeres que ha dado nuestro terruño, el Instituto Cultural de Aguascalientes editó como un reconocimiento a su trayectoria poética su obra completa, misma que re-editó la institución años después, en 1996.

Bajo otro sol y otro cielo abrileño, igual que el cielo cruel de los zacatecanos que dibujara magistralmente con su palabra RLV, tuve la oportunidad de verla y convivir con ella en la Feria de 1993. Yo seguía siendo un novato promotor cultural y ella la misma e imprescindible mujer poeta, marginal, modesta y sencilla. Ese año, en el marco de la entrega del Premio de Poesía Aguascalientes, certamen del cual fue jurado y le entregó el galardón a Baudelio Camarillo por su obra “En memoria del reino”, se rindió justo homenaje al autor de “No me preguntes cómo pasa el tiempo”, hoy imprescindible leyenda urbana y literaria, el viviente y ubicuo poeta mayor José Emilio Pacheco. Ni ella ni José Emilio le hicieron el feo a un concierto de rock. Fuimos a la presentación rockera del neonato grupo de Café Tacuba en la centenaria Plaza de Toros San Marcos. Más de dos mil quinientos jóvenes y uno que otro “adulto mayor” nos apretujábamos en el coso taurino para escuchar a la revelación juvenil del rock mexicano. Después de media hora de forcejeos y tacleadas logramos avanzar y ubicarnos en medio tendido, un lugar ideal para escuchar el concierto y ver atónitos la euforia de los jóvenes hidrocálidos. En esas estábamos cuando ellos (los Cafetos) sin saber que JEP estaba en la plaza escuchándolos, y nosotros ajenos al estreno de la nueva rola de los rockeros, comenzamos a oír la suave cadencia de: “Oye Carlos ¿por qué tuviste que salirte de la escuela esta mañana?”; el homenaje de Café Tacuba a “Las batallas en el desierto”, la emblemática obra de JEP que ha marcado el rito de iniciación de múltiples generaciones de lectores mexicanos. José Emilio, con la sorpresa marcada en el rostro y con un nudo en la garganta; ella, con su cabellera blanca y la alegría juvenil que reflejaban sus ojos de siete décadas de poesía, sólo atinó a decir: “Esto es mejor que cualquier premio oficial”.

El Instituto Cultural de Aguascalientes ha publicado en dos ocasiones su obra completa. Ella fue condiscípula y amiga cercana de Jaime Sabines y Rosario Castellanos, con quien viajó y vivió en España, así como integrante del grupo “8pm” (Ocho poetas mexicanos), así bautizados por Alfonso Méndez Plancarte en el mítico año de 1955. A ese grupo pertenecían, además de ella, Rosario Castellanos, Efrén Hernández, Javier Peñaloza (su esposo), Octavio Novaro, Roberto Cabral, Honorato Ignacio Magaloni y Alejandro Avilés.      

Abogada y maestra de literatura egresada de la UNAM, , poeta, profesora en la Escuela de Periodismo Carlos Septién y en la Universidad Iberoamericana, cofundadora de Radio Educación y jefa de redacción en múltiples revistas y suplementos literarios, amiga y tutora de muchos jóvenes poetas, entre ellos varios hidrocálidos, merecedora de distintos premios y uno que otro reconocimiento (“nadie es profeta…”), en su novena década de generosa vida, ella sigue sembrando su poesía y el don de su magisterio, y por supuesto, sigue cosechando merecidas simpatías, caras amistades y muy pocos y agradecidos reconocimientos de su tierra natal. Y a propósito, viene a mi mente un fragmento de su poema “Y mudos ante el árido paisaje”, que retrata nítidamente nuestra pequeñez como hidrocálidos:

Un hato de mansísimos corderos

reverbera en el cobre de un sol viejo:

cobre en la piel

cobre

en el sabor de boca

que tiene el silencio.

No ver, no oír, no hablar,

bajo la palma del sombrero.

Tierra de ven, de acata, de déjate llevar,

mientras la línea dura de la boca

afila su amenaza.

Ayer, 12 de abril, la juvenil Dolores Castro, mujer, poeta y auténtica Maestra aguascalentense, cumplió 86 años de fructífera vida. Ayer, como en 1990, me tomé una copa de vino (esta vez tinto) a su salud. Ojalá tengamos muchos brindis más por ella en el porvenir. Con sincero afecto.

Pilón. Si alguien en el Ferial de este año recuerda el Ferial de 1994, no se espante, es pura coincidencia.

Una de las expresiones más bellas de la artesanía mexicana es sin duda el juguete mexicano, cuantos de nosotros al ver un trompo, un balero, unas canicas, los boxeadores de madera, los pequeños trastos de cocina de madera y de latón, entre muchos otros, nos recuerdan la infancia y con ellos las muchas horas de diversión y juego con ellos. Ahora en Aguascalientes, hay un lugar que además de tener en exhibición estos juguetes, también se da a la tarea de enseñar a los niños y a todo el que lo desee, la confección de algunos de ellos, como un esfuerzo por preservar esta auténtica muestra de cultura popular.

Con un trabajo de casi 10 años, los hermanos Guadalupe y Jorge Rodríguez Herrera y Evangelina Martínez Fernández se dieron a la tarea de coleccionar juguete tradicional mexicano, y quienes por su interés en preservar y dar a conocer éstos, en sus inicios los presentaron en pequeñas exposiciones itinerantes en los municipios de Aguascalientes y también en el estado de Guanajuato. Hace tres años deciden establecer un espacio en nuestra ciudad donde poder mostrarlas al público, y es así como nace Espacio Multicultural a.c. ESMULC, como una opción de mostrar de manera permanente esta colección de casi mil juguetes y además abrir un espacio cultural independiente con el fin de propiciar intercambios, encuentros, seminarios, conferencias, así como talleres infantiles, juveniles y para adultos con el fin de promover en primera instancia esta manifestación rica y tradicional de la cultura popular mexicana. La filosofía de este grupo de ciudadanos preocupados y ocupados en este trabajo de preservar esta manifestación de cultura popular la expresan de la siguiente manera: la de constituir un grupo independiente que busca el reconocimiento y valorización de las diversas manifestaciones culturales y artísticas que forman parte de la identidad de los pueblos de nuestro país, mediante actividades de investigación, promoción y difusión cultural.

Aunado a la colección de juguete mexicano, se suma ahora, una colección de máscara mexicana, entre las que cuentan con algunas ceremoniales y algunas ornamentales, El juguete mexicano y las máscaras, fruto de un paciente trabajo de recolección se exponen de manera permanente; aunado a estas, Espacio Multicultural, crea una sala de temporal, en la cual el pasado 03 de abril, se inauguró la exposición intitulada Andares del artista plástico Samuel Morales Reyes, una pequeña pero bien montada exposición digna de visitarse.

La respuesta por parte del público no se hizo esperar y en la ceremonia de reinauguración, la nutrida concurrencia del público; representantes de diversos sectores del ámbito cultural independiente y de algunos medios de comunicación, mostró una vez más la posibilidad de la construcción de caminos a través de las redes ciudadanas independientes en la investigación, promoción y difusión de la cultura.

Aunado a una emotiva reinauguración de este espacio, con el sonar de los caracoles y en vez del tradicional corte del listón inaugural,  la apertura se realizó con la apertura de las puertas de todas las salas, al tiempo que  comenzaban a sonar la notas musicales de una marimba con música  chapaneca y oaxaqueña, y con la degustación de bocadillos mexicanos y para finalizar con la presentación de la obra de teatro “Con permiso del Marido”                          por el grupo de Teatro Hamlet, quienes por cierto están por arribar a sus aniversario número 76 de trabajo ininterrumpidos. 

Es de destacar el empuje de este grupo, que además se ha preocupado por ofrecer talleres de creación de juguete mexicano, quienes nos narran con gran emoción su experiencia de estos talleres, al observar invariablemente la alegría y sorpresa que produce en los niños la elaboración y posteriormente el jugar con estos juguetes. El rescate y la difusión del juguete mexicano es digno de apoyarse, con él muchas generaciones de niños crecieron desarrollando su imaginación, corriendo, saltando, conviviendo, ganando y perdiendo aceptando las habilidades del otro. Enhorabuena por iniciativas de jóvenes que aman lo nuestro, concluyo retomando sus propias palabras, conscientes de la vastedad del patrimonio cultural mexicano, creemos que es necesario colaborar desde la sociedad civil para realizar una tarea cuya magnitud excede con mucho las posibilidades de una sola instancia del gobierno o de la sociedad. n

n estos tiempos de efervescencia política, de los audio y video escándalos, de la mercadotecnia política-electoral, fuera del glamour electoral y fuera de los escandalosos sueldos de los Ciudadanos Consejeros Electorales del Consejo General del Instituto Federal Electoral, se encuentran los héroes anónimos de la jornada electoral, aquellos a los que pocas o nulas veces se les reconoce su labor titánica para capacitar y preparar a más de 7.5 millones de mexicanos, quienes fungirán como funcionarios de casilla el próximo 5 de julio. De ellos pues, tengo la fortuna de conocer a una persona muy cercana, una amiga, a quien en días pasados me encontré por casualidad, casi no la reconozco, me sorprendí al verla y es que no es para menos si está delgadísima…  

¡Hola! ¿Cómo estás?   Bien gracias, trabajando en el IFE (su comentario fue con una gran sonrisa, eso me hizo pensar que ella es una más de las personas que se encuentran orgullosas de trabajar en esta Institución)   Así, que gusto saber que somos compañeras, ¿en qué consiste tu trabajo?   Soy Capacitador Asistente Electoral en el 02 Distrito Electoral, no sabes es padrísimo el trabajo que realizamos, pero también muy cansado, ¡mira los pantalones ya casi se me caen! jeje.   ¿Supongo que tienes mucho trabajo?   Realmente si, trato de hacer el trabajo lo mejor que puedo, pero en ocasiones los ciudadanos no se dejan. En mi caso el centro de capacitación en el cual estoy trabajando es una escuela que se ubica sobre Avenida Héroes de Nacozari, afortunadamente para mí, a los ciudadanos que me correspondió visitar, viven en un área que no me queda alejada de mi domicilio particular, por lo tanto la mayor parte de mi trabajo lo realizo caminado; precisamente por eso te comentaba que mis pantalones ya casi no me quedan, no te imaginas las horas que camino al día para poder visitar a todos los ciudadanos que me correspondió capacitar, y claro primeramente convencerlos de la importancia de su capacitación y posteriormente convencerlos de que acudan al centro de capacitación. Obviamente algunos ciudadanos si los tengo que visitar en vehículo por la distancia en la que se encuentran, pero generalmente me toca caminar y caminar. Pero es un trabajo muy padre, y te sientes muy orgulloso de que gracias a tu trabajo los ciudadanos cuentan los votos de todos los mexicanos.   Y precisamente como te comento el trabajo más difícil es el de convencer a los ciudadanos de participar con el IFE, ya que desgraciadamente la mayoría de las personas que resultaron insaculadas en el sorteo que realiza el IFE no están muy convencidas de acudir al centro de capacitación para recibir la primera capacitación, y entonces es tarea de nosotros los Capacitadores Asistentes Electorales o CAE`S como nos llaman en el IFE, realizar la labor de convencimiento de los ciudadanos y a veces no sólo de ellos sino de sus familiares, según el caso, ya que por ejemplo te encuentras con señoras que sí están convencidas de participar pero sus esposos no lo están tanto, o muchas veces las personas se niegan a participar y ponen de pretexto que sus hijos están pequeños y no tienen quien se los cuide, que sus papás son muy ancianitos y no los deben descuidar, que si el trabajo que tienen no les permite participar, que si la escuela, en fin, si es complicado, pero es nuestro trabajo y me agrada realizarlo.   También nos topamos con malas caras, nos contestan de mala manera, no te abren la puerta, se te esconden, en ocasiones visitamos el mismo domicilio varias veces, porque parte de nuestro trabajo es visitar a toda la lista de ciudadanos que resultaron sorteados para ser funcionarios de casilla e invitarlos a la capacitación correspondiente, por eso no importan las inclemencias con las cuales nos podamos encontrar, tenemos una misión y la misma tenemos y debemos de cumplirla.   Claro que nosotros también fuimos capacitados para realizar el trabajo que nos toca en un proceso electoral federal, los vocales del Instituto Federal Electoral nos capacitan en diversas áreas, antes de que salgamos a visitar a los ciudadanos. Pero además cuenta la formación que cada uno de nosotros tenga, ya que también depende de tu convicción el saber desenvolverte y transmitir al ciudadano la importancia de la participación ciudadana, en mi caso soy profesora, desgraciadamente por la situación que vivimos en México no he podido obtener una plaza en esa área, pero mi formación académica, me ha permitido entablar una mejor y adecuada comunicación con los ciudadanos y así hacerles ver que cada uno de nosotros cuenta y desde nuestro rincón más humilde, somos piezas fundamentales para la consecución  de la jornada electoral.   ¡Órale, pues si me dejas sorprendida!, yo ya tengo tiempo trabajando en el IFE, pero nunca me había tocado platicar con un CAE, saber como realizan su trabajo, y entender más la labor tan importante que realizan para lograr que las elecciones federales se realicen de la mejor manera…   Efectivamente los CAE´S son los héroes no reconocidos de las elecciones, son trabajadores del Instituto Federal Electoral que son contratados después de un proceso meticuloso de selección, exámenes y entrevistas que les realizan no solo vocales de las Juntas Distritales del Instituto Federal Electoral, sino también Consejeros Electorales de los Consejos Distritales donde les tocará trabajar. Los contratan a partir del mes de febrero del año de la elección, situación que nos lleva a descartar que tales empleos disminuyan el creciente porcentaje de desempleo que vive nuestro país, ya que el contrato de trabajo se les termina en julio.