Una de cal… Quien fuera candidato de Morena a la alcaldía capitalina, Arturo Ávila Anaya, ya está amenazado por el morenaje local, ahora resulta que el empresario la regó bien gacho en la campaña y tendrá que salirle al parche con el chistecito de la multa que le aplicó el Instituto Nacional Electoral por el video que se aventó, “de compas” con Pablo Montero para difundir su imagen. En más de una ocasión durante la campaña, se indicó a Arturo Ávila que estaba gastando dinero de más, él siempre lo negó, como lo negaron los líderes de Morena, pero ahora que el partido se está deshaciendo, la diputada local por Morena, Natzielly Rodríguez Calzada, lamentó que no se haya declarado de forma pertinente por parte del equipo de campaña de Ávila Anaya cuál fue el costo real del spot, lo que causó estragos para el partido. “Hay responsabilidad, me parece, del entonces candidato, sin embargo, ahora tendremos que salirle al problema y tendremos que pagar la multa (…) es un tema meramente del presidente del partido, Cuitláhuac Cardona, que tendrá que platicarlo porque si es un acto de deshonestidad me parece pertinente que colaborara con esa multa”, consideró Rodríguez Calzada.
¿Y las pruebas? Como un muerto en una mala película de zombis, ayer previo al evento por el Día de la Población, el secretario de Gobierno del Estado, Enrique Morán Faz, revivió la polémica de poca monta que generó hace un par de semanas la morenita Natzielly Teresita Rodríguez Calzada, al acusar al titular de la Secretaría de Gestión Urbanística y Ordenamiento Territorial (Seguot), Armando Roque Cruz, de prácticas de corrupción, a lo que éste respondió solicitando a la Fiscalía Especializada Anticorrupción que requiera a la diputada para que presente pruebas de estos supuestos actos y es que según el secretario de Gobierno, Natzielly Teresita Rodríguez no ha presentado un solo indicio que sustente sus acusaciones que según Morán Faz tenían como único objetivo el golpeteo político, porque recordemos, tal parece que los morenos siguen en campaña pese a que llevan seis años en la administración pública.
La marcha de Zacatecas. En el PRI están de fiesta, el Revolucionario Institucional de Enrique Juárez Ramírez gasta su pólvora en infiernitos celebrando el nombramiento del exgobernador Carlos Lozano de la Torre… en Zacatecas, pues resulta que ha sido designado parte del Consejo de Desarrollo Económico del Gobierno del estado vecino estado de Zacatecas. Los priistas señalan: “No es obra de la casualidad que el ex mandatario, Lozano de la Torre, sea condecorado con la distinción de formar parte del gabinete del Gobernador Alejandro Tello, por el contrario, los resultados positivos de la administración en Aguascalientes y su trayectoria como funcionario público avalan el trabajo eficiente del destacado priista. Es oportuno recordar que Lozano de la Torre, en tres periodos diferentes ha ocupado el cargo como Secretario de Desarrollo Económico del Gobierno de Aguascalientes”… este… pues sí, el exgobernador ya tiene chamba, ¿son necesarios los fuegos pirotécnicos?, quizá Enrique Juárez debería estar más preocupado por un PRI local desangrándose y en la lona que por el puesto conseguido por el dueño del partido, así como van, al rato van a festejar los triunfos de Morena porque alguna vez fueron militantes priistas, no hay que ser.
La viga en el ojo ajeno. Luego de la renuncia y denuncia del secretario de Hacienda, Carlos Urzúa Macías, al señalar en el Gobierno Federal actos de nepotismo, ahora las conciencias inmaculadas, aquellas que no reconocen que es una práctica de corrupción muy común en los gobiernos de todos los colores, comenzaron a levantar sus voces. Es el caso de la diputada local panista Gladys Ramírez, al manifestar que en la administración federal se priorizan los amiguismos sin importar las capacidades de las personas frente a cargos públicos, mostrando así su inconformidad de los dichos por el economista antes integrante del gabinete. Es muy fácil ver la paja en el ojo ajeno, qué distinto sería si analizara un poco su entorno más próximo, el cual seguramente conoce mucho mejor y sabe que también se “cuecen habas”.
¿Es un honor estar con Obrador? Los que se le han ido del manto protector de la Cuarta Transformación demuestran que no, que no es un honor, porque o estás con el presidente de la República o contra él, no hay de otra en el mundo polarizado de Andrés Manuel López Obrador, tras la renuncia desató a sus perros, permitió que se le fueran a la yugular a Carlos Urzúa, la diputada Tatiana Clouthier lo descalificó llamándolo cobarde, Porfirio Muñoz Ledo demandó que se investigara al extitular de Hacienda por conflicto de intereses… sin pruebas. Decimos que López Obrador suelta a sus perros y los azuza, ayer en la mañanera dio muestra de su intolerancia y al cobijo de “con todo respeto”, no le perdonó a Urzúa Macías que le renunciara, comenzó señalando que “Tuve diferencias con él, yo lo respeto mucho, pero estamos en un proceso de transformación y aquí no se oculta nada, no es que salió del gobierno por motivos de salud, no, es que él es un hombre con criterios, como nosotros, tuvimos entre otras discrepancias, lo del Plan de Desarrollo, que hubieron dos versiones y la versión que quedó es la que yo autoricé, que incluso me tocó escribirla, había otra versión y sentí que era continuismo, era como si lo hubiera hecho (Agustín) Carstens o (José Antonio) Meade, con todo respeto”, o sea que sólo los chicharrones de López Obrador truenan. Enseguida descalificó las acusaciones de Carlos Urzúa disminuyéndolas a no querer acatar sus órdenes, porque “Yo le encargué a Alfonso Romo que ayudara en la coordinación para el funcionamiento de la banca de desarrollo y no había en esto acuerdo, o sea, había diferencias entre ellos, notorias, seguramente eso era algo evidente” y tan tan, se acabó, Carlos Urzúa no supo doblegarse. Para seguir echándoselo a los perros, López Obrador se sacudió cualquier culpa posible, “¿se acuerdan la carta de renuncia de Germán Martínez?, pues el destinatario era Urzúa, el que se aflige, se afloja”… ¿Es un honor estar con Obrador? La respuesta es sí, siempre y cuando él quiera, es un padre caníbal, no un mesías, un Saturno furibundo que no permite la desobediencia. Y si no nos cree, para rematar, ante la pregunta de si le permitiría a Arturo Herrera que le dijera que no, de inmediato contestó que no, matizado: “Yo lo convenzo”, afirmó López Obrador, es decir, lo alineo o lo alineo y se acabó. Triste.
La del estribo. Con todo, la verdad es que Aguascalientes está lejos de los altos círculos de la corrupción, esos que representaba Juan Collado, y donde destacan los expresidentes priistas Carlos Salinas de Gortari, Enrique Peña Nieto, el hermano incómodo Raúl Salinas, el líder petrolero Carlos Romero Deschamps, o Carlos Ahumada; al abogado lo acusa el empresario Sergio Hugo Bustamante por presunto robo de identidad; el círculo rojo ha coincidido en reconocer a Juan Collado como el protector de los corruptos y piden que sea inmediatamente condenado a la hoguera, ¿y en Aguascalientes?, acá cuando preguntan por Juan Collado resulta difícil ubicarlo, te tienen que decir: el esposo de Yadhira Carrillo… No se extrañe, esa es la liga donde juega la política local.
@PurisimaGrilla
